El FC Barcelona ha sabido sacar adelante los últimos compromisos, pero en el vestuario y en la pizarra de Hansi Flick hay una realidad evidente: Balde, Lamine Yamal y Fermín son insustituibles. Los tres futbolistas, actualmente lesionados, han demostrado ser piezas fundamentales en este Barça. Cada uno aporta cualidades distintas que elevan el nivel competitivo del equipo y su ausencia se nota más de lo que parece. Flick los echa de menos y cuenta los días para poder recuperarlos.
Balde, el pulmón de la banda
Alejandro Balde es, sin duda, el lateral que más garantías ofrece a día de hoy. Su velocidad, su capacidad para proyectarse en ataque y su intensidad defensiva lo convierten en un jugador diferencial. Sin él, el Barça pierde una salida limpia por la izquierda y profundidad constante. Flick ha tenido que ajustar la defensa para cubrir esa baja, pero el entrenador alemán es consciente de que ningún jugador en la plantilla tiene el mismo perfil que Balde. Su regreso dará aire fresco a una zaga que lo necesita.
Lamine Yamal, el desequilibrio en estado puro
El caso de Lamine Yamal es distinto, pero igual de trascendente. Con solo 18 años, el extremo se ha convertido en el futbolista más desequilibrante del Barça. Su capacidad para romper defensas, encarar y generar ocasiones le da al equipo algo único. Flick sabe que su verticalidad es oro puro, especialmente en los partidos donde el rival se encierra atrás. Sin él, el Barça pierde creatividad en el último tercio del campo. Lamine trabaja a contrarreloj en su recuperación porque tiene claro que quiere estar al 100% para el gran duelo de Champions ante el PSG.
Fermín, la sorpresa positiva
Si Balde y Lamine ya estaban llamados a ser importantes, lo de Fermín ha sido la gran sorpresa positiva. El canterano ha convencido a Flick con su intensidad, llegada al área y capacidad para mover el balón con criterio. En un Barça donde las rotaciones en el centro del campo son vitales, Fermín se había ganado un hueco en el once inicial. Su lesión llegó en el peor momento, pero en el cuerpo técnico confían en que vuelva pronto para recuperar el ritmo.
Lo demostrado en los últimos partidos es evidente: el Barça es más fuerte con Balde, Lamine y Fermín en el campo. Tres perfiles distintos que, juntos, hacen al equipo más competitivo y equilibrado. Flick sabe que recuperarlos será clave para afrontar un calendario cargado de compromisos decisivos. La buena noticia es que la espera no será demasiado larga y el técnico alemán podrá contar pronto con tres de sus futbolistas más determinantes.