La etapa de Ansu Fati en el FC Barcelona parece haber llegado a su fin. El delantero formado en La Masia no entra en los planes de Hansi Flick, y en el club ya trabajan a contrarreloj para cerrar su salida cuanto antes. Según fuentes cercanas a la dirección deportiva, esta misma semana podría cerrarse su cesión al AS Mónaco, en un movimiento que permitiría liberar masa salarial y dar espacio a nuevos fichajes.
El técnico alemán ha sido claro desde el primer día: quiere una plantilla corta, competitiva y sin jugadores sin sitio real en la rotación. En ese contexto, Ansu Fati no ha convencido ni a Flick ni a Deco.
Mónaco, destino ideal
El AS Mónaco ha sido el club que más se ha movido por el jugador. En contacto directo con el entorno de Ansu y con el Barça, el club del Principado está dispuesto a asumir parte importante de su ficha y ofrecerle un rol protagonista. El Barça, que priorizaba una venta, ha acabado aceptando que una cesión con condiciones favorables puede ser la mejor vía para que el jugador recupere su nivel.
Deco, director deportivo, ya tiene el acuerdo muy encarrilado. Faltan algunos flecos en la negociación, como el porcentaje exacto del salario que asumirá cada club y si habrá o no opción de compra. Pero si todo avanza como está previsto, Ansu Fati viajará a Mónaco en los próximos días para pasar el reconocimiento médico.
Un talento que se apaga
El caso de Ansu es uno de los más dolorosos en el Barça de los últimos años. Llegó a ser el heredero natural de Leo Messi, incluso portó el dorsal ‘10’ tras su marcha. Sin embargo, las lesiones graves y continuadas truncaron su proyección. Desde entonces, ha sido incapaz de recuperar su mejor nivel.
A sus 22 años, Ansu necesita continuidad, confianza y minutos. Y Flick, en un proyecto donde el ataque contará con nombres como Nico Williams, Lamine Yamal, Dani Olmo, Raphinha y Ferran Torres, no le puede garantizar nada de eso. De ahí que su salida haya sido una de las prioridades de este inicio de mercado.
El Barça lo ve como una solución positiva
En el seno del club, aunque hay tristeza por cómo ha evolucionado el caso de Ansu, se considera que una cesión a un equipo con ambición europea como el Mónaco es una buena oportunidad. El objetivo es que el jugador vuelva a sentirse importante, gane confianza y, si todo va bien, pueda revalorizarse para el verano de 2026, donde se tomaría una decisión definitiva sobre su futuro.
Todo apunta a que esta será la semana clave para cerrar el capítulo de Ansu Fati en el Barça, al menos de forma temporal. Flick ya ha decidido. Y Deco ejecuta.