Ferran Torres es uno de los jugadores que marcan la actualidad en el Barça, que ha recibido varias ofertas para traspasarlo, una posibilidad que no acaba de estar descartada. Al interés ya conocido del Newcastle United, ahora hay que añadir el del Aston Villa, que también se posicionó para acogerlo en sus filas el verano anterior, y esta vez puede hacer una propuesta muy convincente para ficharlo, ya que gusta mucho a Unai Emery.
De modo que en estos momentos no se puede descartar absolutamente nada, y su continuidad en el Camp Nou es una auténtica incógnita. Sin embargo, ‘El Tiburón’ ha manifestado su intención de seguir a las órdenes de Hans-Dieter Flick, y de respetar el contrato que tiene firmado, pero impone una condición indispensable para no hacer las maletas. Porque exige tener un rol protagonista para seguir, pues tampoco tendría ningún problema en decir adiós.

La gran prioridad del ex del Valencia y del Manchester City es seguir jugando de manera habitual, para tener garantizada una plaza en la convocatoria de Luis de la Fuente para el Mundial de 2026. Y aunque asume que la titularidad es muy complicada, por culpa de la presencia de estrellas como Robert Lewandowski, Lamine Yamal o Raphinha Dias, se conforma con ser un revulsivo, y tener el mismo papel que tuvo el año anterior.
No obstante, Ferran tiene muchas dudas de que pueda seguir jugando de manera habitual, después de filtrarse que Joan Laporta y Deco están trabajando en la contratación de un nuevo atacante, y han aparecido en la agenda nombres como los de Nico Williams, Rafael Leao, Marcus Rashford, Viktor Gyökeres o Alexander Isak. El Barça espera traer a alguien, y esto supondría una noticia pésima para los intereses del ‘7’, que vería como su protagonismo se reduce.
Por esa razón, Torres tiene previsto reunirse personalmente con Flick, y hablar cara a cara, para conocer de primera mano los planes que tiene con él. Y si no le convencen, se planteará iniciar un nuevo reto en otro lugar.
Ferran, muy revalorizado después de su fantástica temporada
Ferran se encuentra en una situación privilegiada, después de haberse revalorizado considerablemente, gracias a la fantástica temporada que ha completado, marcando muchos goles, a pesar de no ser titular de forma habitual.
Y esto ha provocado que no le falten pretendientes en caso de que decida abandonar el Barça. Pero, como mínimo, alguien tendrá que poner encima de la mesa un total de 50 millones de euros para que Laporta y Deco acepten negociar.