En el FC Barcelona hay jugadores que afrontan la temporada con el reto de reinventarse, y Ferran Torres es uno de ellos. El delantero valenciano, que cerró la pasada campaña con un papel protagonista y goles decisivos, siente que ese tramo final fue un punto de inflexión en su carrera como azulgrana. Ahora, con la confianza por las nubes y el respaldo de Hansi Flick, está decidido a dejar claro que su sitio está en el once.
En la anterior temporada, Ferran pasó de estar en un segundo plano a convertirse en uno de los atacantes más determinantes. Sus goles, su agresividad en los últimos metros y su capacidad para aparecer en momentos clave hicieron que su rol cambiara por completo. "Fue un antes y un después", confiesan desde su entorno, señalando que esos meses le sirvieron para recuperar la autoestima futbolística y asentarse mentalmente como un jugador de peso en la plantilla.

Confianza total de Flick
Hansi Flick llegó con una idea muy clara: quiere un ‘9’ móvil, capaz de presionar alto y ofrecer soluciones en ataque más allá del gol. Y ahí, Ferran encaja como un guante. El técnico alemán no solo valora su capacidad para anotar, sino también su versatilidad para jugar en las bandas y su sacrificio defensivo. Esa polivalencia le ha asegurado minutos y protagonismo desde el inicio de la pretemporada.
Eso sí, Ferran sabe que no lo tendrá fácil. Con jugadores como Lewandowski, Raphinha, Lamine Yamal o Rashford peleando por los puestos ofensivos, cada partido y cada entrenamiento serán un examen. Pero lejos de intimidarse, el valenciano utiliza esta competencia como motivación.
El reto del ‘9’
Aunque puede actuar en varias posiciones, Ferran ha dejado claro que se siente muy cómodo como referencia ofensiva. Ahí puede aprovechar su instinto goleador y sus desmarques para romper defensas cerradas. Además, con Flick insistiendo en un fútbol dinámico y vertical, el valenciano cree que este puede ser su año para firmar las mejores cifras de su carrera.

Su actitud en los entrenamientos y sus declaraciones dejan un aviso para todos: Ferran Torres no está aquí para ser un jugador de rotación. Quiere ser titular, quiere marcar goles y quiere ser decisivo en los partidos grandes. Después de la metamorfosis del curso pasado, el delantero afronta esta temporada con la convicción de que está preparado para liderar al Barça en ataque.
Si mantiene este nivel de confianza y efectividad, Ferran Torres podría pasar de ser un jugador importante a convertirse en uno de los referentes ofensivos del equipo. Y en un Barça que aspira a todo, Flick sabe que tener a un delantero así en su mejor versión puede marcar la diferencia.