Fermín López se ha mostrado profundamente decepcionado con el Barça después de haberse enterado de la verdad que le estaban ocultando. Porque durante la última semana, el tema más comentado ha sido su posible salida, para unirse al Chelsea, que había presentado una oferta en firme valorada en unos 55 millones de euros, para convencer a Joan Laporta y a Deco de que le abrieran las puertas. Y el Newcastle United también hizo una ofensiva.
Todd Boehly y Enzo Maresca tenían claro que era un refuerzo excepcional, y que podía ser un pilar fundamental en el combinado ‘blue’, gracias a su capacidad anotadora y sus increíbles condiciones. Y para seducir al internacional español, le habían colocado encima de la mesa un salario muy superior al cual percibe actualmente, multiplicándolo por tres. Una cosa que no fue suficiente para que se decantara por decir adiós al Camp Nou, aunque tuvo dudas.

Hans-Dieter Flick habló personalmente con su pupilo para pedirle que no se marchara, y le prometió que sería muy importante en sus sistemas, a pesar de haberle señalado públicamente. Le pidió disculpas, y entendía su enfado por haber sido sustituido al descanso contra el RCD Mallorca, y por no haber jugado ni un solo minuto contra la UD Levante. Y, al final, el ex del Betis, del Linares y del Recreativo de Huelva se quedó para pelear por la titularidad.
Sabe que tiene un reto muy complicado, por la competencia que existe en la parcela ofensiva, con estrellas como Dani Olmo o Pablo Paéz ‘Gavi’, con el cual ya no se dirige la palabra. Pero Fermín opina que está preparado para ser uno de los líderes del Barça, y está convencido de que acabará siendo intocable. No obstante, ahora se ha entrado de que la verdadera intención de Laporta y de Deco, en todo momento, fue la de venderlo a Stamford Bridge.

No creían que fuera imprescindible, y preferían obtener unos ingresos considerables, para solucionar el problema con las inscripciones, y poder ahorrarse este dinero e invertirlo en algún refuerzo más necesario próximamente.
Fermín, traicionado por la directiva
Lógico que Fermín tenga la sensación de que la directiva del Barça le ha traicionado, y tenga un enfado monumental con Laporta y con Deco. Pero tan solo le importa la opinión de Flick, que es el encargado de hacer las alineaciones.
Aunque si en enero no ha tenido la continuidad que deseaba, no supondrá ningún problema para él volver a plantearse una despedida.