Hace solo 3 años, el Chelsea rompió el mercado de fichajes de invierno para hacerse con los servicios de Mykhailo Mudryk. En aquel momento, el extremo ucraniano estaba triunfando en el Shakhtar Donetsk, al marcar 10 goles y dar 8 asistencias en solo 18 partidos. Media Europa iba tras los pasos de Mudryk, por lo que el Chelsea decidió adelantarse a todos y puso encima de la mesa 70 millones de euros fijos más 30 en variables para fichar a la estrella del momento.
Hoy, 3 temporadas después, Mykhailo Mudryk está prácticamente sin equipo y a un paso de colgar las botas, con solo 24 años, lo que le ha llevado a estar entrenándose con el equipo ucraniano de atletismo para intentar ser velocista en los Juegos Olímpicos de Los Angeles.

Fichaje estrella del Chelsea
Formado en las categorías inferiores del Metalist Kharkiv y del Dnipro, Mudryk no tardó en llamar la atención del Shakhtar Donetsk, que le fichó cuando solo tenía 16 años. El extremo jugó una temporada como cedido en el Arsenal Kiev y en el Desna Chernihiv, hasta hacerse un hueco en el conjunto de los mineros. Finalmente, el jugador explotó en la temporada 2022/23, mostrándose como un extremo eléctrico con capacidad para marcar goles y dar asistencias. Su nombre no tardó en sonar para varios clubes de la Premier League y casi sin tiempo para la rumorología se confirmó su fichaje por el Chelsea a cambio de 70 millones de euros.
En Londres, sin embargo, Mudryk nunca llegó a adaptarse. Su mejor temporada fue la 2023/24, en la que participó en 41 partidos, aunque con un bagaje muy pobre de 7 goles y 2 asistencias, y mostrando una versión muy alejada de la que deslumbró en el futbol ucraniano.

Positivo en dopaje y sueño con ser atleta olímpico
Todo cambió el 17 de diciembre de 2024, solo 2 años después de su llegada a Londres, cuando la Federación Inglesa informó que suspendía la ficha de Mykhailo Mudryk por haber dado positivo en meldonium, un modulador metabólico prohibido por la Agencia Mundial Antidopaje. La suspensión, a falta de una resolución definitiva, sigue siendo provisional, aunque Modryk podría ser sancionado con 4 años, lo que prácticamente finiquitaría su carrera como futbolista. El Chelsea le tiene apartado y su dorsal, el 10, ha pasado a manos de Cole Palmer.
Modryk, sin embargo, parece que no se rinde, que quiere triunfar en el mundo del deporte, por lo que se ha pasado al atletismo, aprovechando su espectacular velocidad. En un partido del Chelsea llegó a alcanzar los 36,5 km/h, una capacidad que le hace soñar con participar en los Juegos Olímpicos de Los Angeles 2028, disputando la prueba de los 200 metros lisos. Sobre el papel lo tiene complicado, ya que sus tiempos aún están lejos de la élite, aunque todo es posible en una carrera deportiva marcada por los giros de guion inesperados.