El Espanyol tiene una nueva misión este domingo: vencer al Atlético de Madrid. Después de la eliminación de la Europa League contra el Wolverhampton, los de Abelardo no tienen ninguna otra competición donde dedicar sus fuerzas y tendrán que centrarse en la Liga Santander. Para conseguir la deseada salvación de la categoría, cada partido será una final, y la siguiente pasa por el RCD Stadium contra el equipo colchonero (Movistar LaLiga/16h).
Raúl de Tomás, prácticamente a punto
Posiblemente, la mejor noticia para el Espanyol es que Raúl de Tomás ya está prácticamente recuperado de sus molestias al aductor. El delantero madrileño lleva entrenando toda la semana con normalidad, pero Abelardo tampoco ha querido tirar cohetes antes de tiempo y se ha mostrado prudente hacia su jugador talismán: "Esperamos que sí, aunque no lo puedo asegurar. Está tolerando mejor las cargas, pero un partido puede ser diferente".
EFE
La recuperación de este jugador es necesaria para el Espanyol, ya que ha marcado un gol en cada uno de los cinco partidos que ha disputado, por lo cual todas las esperanzas están puestas en él. La segunda gran referencia ofensiva del Espanyol pasa por Jonathan Calleri. El delantero argentino marcó un hat-trick contra el Wolverhampton y llega al partido contra el Atlético en un estado de forma excelente.
El Atlético, a romper la mala racha a domicilio
Los jugadores del Cholo Simeone tienen un grave problema esta temporada: no ganan fuera de casa desde hace dos meses y medio. Con esta premisa, el equipo intentará buscar una victoria para volver a la tercera posición de la clasificación. Para hacerlo, parece que Simeone ya tiene claro el suyo 11, a quién ha dedicado más tiempo el entrenamiento previo. En la defensa, Trippier, Savic, Giménez y Lodi; en el centro del campo, Koke, Thomas, Saúl y Carrasco; y en el ataque, Correa y Morata.
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Quien es duda para el partido es Jan Oblak. El portero colchonero se encuentra inmerso en un proceso gripal y sólo pudo entrenar 15 minutos, por lo que podría no jugar el partido.
Juegue quien juegue, el Espanyol tendrá que hacer a un partido excelente si quiere ganar y salir reforzado de cara a la salvación, que cada vez parece más complicada.