La selección española de baloncesto, actual campeona de Europa, ha sacado músculo en su debut al Eurobasket ante Montenegro (99-60). Sin querer sustos y dejando claro a todo el mundo cuáles son las intenciones del combinado de Sergio Scariolo.

Sólo cinco minutos han durado las dudas, los nervios y la preocupación del equipo español. Los mismos que ha tardado en ponerse por delante en el marcador y no permitir nada más a un rival muy inferior. Cuando los de Scariolo se han puesto por delante, Montenegro ha dado un paso atrás, ha intentado atrincherarse y protegerse, y eso ha sido su peor elección.

Ya con otra velocidad y otra confianza, a España sólo le faltaba saber si con las rotaciones su superioridad sería tan clara, y ha resultado que sí. En algunos momentos se ha llegado a una especie de festival del equipo español, aunque Scariolo ha preferido parar la fiesta y volver a la solidez del juego.

Por parte montenegrina, algunos golpes de genio, más de lucha que de clase de Nikola Vucevic y poco más. Marko Todorovic y Bojan Dubljevic han estado discretos y Montenegro se ha ido desangrando poco a poco. Los balcánicos han lanzado la toalla en los diez minutos finales, momento en el cual han tenido protagonismo los más jóvenes del combinado español.