En medio de las cábalas sobre quién ocupará el hueco que dejó Iñigo Martínez en el centro de la defensa, Hansi Flick tiene un nombre que no figura en muchas quinielas, pero que cuenta con toda su confianza: Gerard Martín. El futbolista, que el curso pasado ya fue importante para el técnico alemán desempeñándose como lateral izquierdo, podría convertirse en un recurso estratégico para reforzar el eje de la zaga.
Flick ya lo ha dejado entrever durante la pretemporada. Aprovechando la ausencia de Iñigo y la rotación de centrales, probó a Gerard Martín como central zurdo y quedó muy satisfecho con el rendimiento. No se trata de un cambio radical de posición, sino de una adaptación natural: su perfil zurdo, su buena salida de balón y su capacidad para leer los movimientos del rival le convierten en un jugador muy válido para ese rol.

Un comodín de lujo
El entrenador alemán valora especialmente la versatilidad y disciplina táctica de Gerard Martín. En la pasada temporada, cumplió a la perfección en el lateral izquierdo, aportando equilibrio defensivo y apoyos constantes en la salida de balón. Ahora, Flick ve en él un comodín perfecto para cubrir la posición de central izquierdo cuando la situación lo requiera, ya sea por lesiones, sanciones o rotaciones.
Su físico, aunque no tan imponente como el de otros centrales, lo compensa con inteligencia táctica y una notable capacidad de anticipación. Además, su manejo de la pierna zurda facilita la circulación y el inicio de jugadas desde atrás, un aspecto que Flick considera clave en su modelo de juego.
No será titular, pero tendrá minutos
En la pizarra de Flick, Gerard Martín no parte como titular por delante de Christensen, Eric Garcia o el propio Araujo, pero sí como una alternativa fiable que le da tranquilidad. El técnico sabe que las temporadas son largas, que las bajas llegarán, y que tener un jugador capaz de adaptarse sin que el nivel colectivo se resienta es un lujo que pocos equipos pueden permitirse.
Además, su conocimiento de la posición de lateral le da un plus defensivo en situaciones abiertas, donde su velocidad y su capacidad de cierre en banda pueden ser decisivas. Flick también valora que, cuando actúa como central, aporta una salida de balón más limpia y segura que otros defensores de corte más físico.

Confianza total
Fuentes del vestuario aseguran que Flick ha transmitido a Gerard Martín su plena confianza. Sabe que no le tocará fácil entrar en el once, pero también que tendrá oportunidades a lo largo de la temporada. Si las aprovecha, podría convertirse en una pieza mucho más habitual de lo que muchos imaginan.
En un Barça que busca equilibrio entre experiencia y juventud, Gerard Martín encaja a la perfección en el perfil de jugador que Flick quiere potenciar: trabajador, versátil y siempre dispuesto a responder cuando el equipo lo necesita. Y en una temporada exigente, esa combinación puede ser oro.