El Barça ha tomado una decisión firme con uno de los nombres propios de la temporada. En los despachos del club azulgrana no hay dudas con que Gerard Martín es intocable. Su irrupción, su rendimiento y su encaje en el nuevo proyecto de Hansi Flick lo han convertido en una pieza absolutamente estratégica, hasta el punto de que Deco ya ha rechazado una oferta formal de 20 millones fijos más 15 en variables procedente del Aston Villa.
En el Barça consideran que Gerard Martín se ha consolidado como el mejor defensa del equipo en lo que va de curso. Su adaptación al puesto de central ha sido total y su rendimiento junto a Pau Cubarsí ha superado todas las expectativas. En un contexto de muchas dudas defensivas, su figura se ha convertido en una certeza.
Flick lo considera clave y prohíbe su salida
Y es que la realidad es que Hansi Flick ha sido tajante. El técnico alemán considera a Gerard Martín una pieza fundamental para su modelo defensivo. Valora su lectura táctica, su salida de balón, su agresividad bien medida y, sobre todo, su química con Cubarsí, una sociedad que Flick quiere consolidar como eje del futuro del Barça.
Flick entiende que encontrar un perfil así en el mercado sería extremadamente caro y arriesgado. Por eso ha trasladado una orden porque la venta está prohibida. El alemán cree que Gerard aporta un equilibrio que ningún otro defensor de la plantilla ofrece ahora mismo y que su progresión todavía no ha tocado techo. Además, su versatilidad es otro factor decisivo. Puede actuar como central zurdo, lateral defensivo e incluso adaptarse a una línea de tres, algo que Flick valora especialmente en su idea de juego flexible.
Deco cierra la puerta pese al fuerte interés de la Premier
De este modo, Deco ni siquiera ha querido entrar en negociación con el Aston Villa. La oferta de 20 + 15 millones fue escuchada, pero rechazada de inmediato. En el Barça consideran que esa cifra no refleja ni de lejos el valor real del jugador, tanto deportivo como estratégico.
La realidad es que en el club ya no se guían solo por necesidades económicas. Gerard Martín se ha ganado un estatus de intocable por rendimiento puro, y eso pesa más que cualquier propuesta externa. En un equipo joven, con muchos proyectos por consolidar, el Barça no quiere debilitar una de las pocas líneas que funcionan a pleno rendimiento. Así pues, el mensaje hacia fuera es contundente. Gerard Martín no está en venta. Flick lo ha blindado, Deco lo respalda y el Barça asume que ha encontrado en él a un defensa diferencial para muchos años. Ni 20, ni 35 millones han sido suficientes para abrir una puerta que, ahora mismo, está completamente cerrada.