Uno tenía la tarea de parar figuras ofensivas como Antoine Griezmann o Kylian Mbappé. El otro, dominar el centro del campo ante portentos físicos como Blaise Matuidi, N'Golo Kanté i Steven N'Zonzi. Bajo la mirada atenta del Barça, los dos lo consiguieron con solvencia. La victoria de Holanda contra Francia (2-0) en la UEFA Nations League confirmó que Matthijs De Ligt y Frenkie De Jong están preparados para reforzar el equipo de Ernesto Valverde.

La selección ornaje, entrenada por el ex blaugrana Ronald Koeman, se deshizo de la campeona del mundo en Róterdam con goles de Wijnaldum y Depay y tiene un pie y medio en la fase final de la Nations League. Si Holanda empieza a recuperar el prestigio es, en gran parte, gracias a De Ligt y De Jong. Este viernes, los dos futbolistas del Ajax que el Barça sigue de muy cerca volvieron a firmar unas actuaciones de nivel. Y eso que sólo tienen 19 y 21 años respectivamente.

De Ligt gana la partida a Mbappé

Era un duelo entre los dos niños prodigio del fútbol actual y la partida la ganó el holandés. De Ligt consiguió frenar las aspiraciones ofensivas de Mbappé, y buena prueba de este hecho es que el conjunto francés sólo chutó 2 veces a la portería del blaugrana Jasper Cillessen.

Impecable por alto, contundente en el choque y fino con la pelota en los pies. El Barça, como la mayoría de los grandes clubs europeos, lo quiere fichar lo antes posible. No saldrá del Ajax por menos de 70 millones, pero al jugador le gusta Barcelona y la secretaría técnica del Camp Nou necesita un relevo para Piqué, que ya tiene 31 años.

De Jong, máximo pasador

Si hay una característica vital para triunfar en el Barça esta es dominar la pelota. Y De Jong, en este aspecto, es infalible. Con 95 pases, el mediocampista se erigió como la brújula de su selección y demostró una efectividad impresionante: 88% de acierto en el pase. Por si fuera poco, también regaló acciones defensivas de categoría.

El Barça lo empezó a seguir antes que De Ligt y su fichaje se considera estratégico para reforzar el centro del campo y dar relevo a Sergio Busquets. Este verano el club intentó vestirlo de blaugrana pero Marc Overmars, director deportivo del Ajax, no dejó que se marchara. Su calidad, sin embargo, está muy por encima del nivel de la Liga holandesa y tarde o temprano acabará saliendo. Si el Barça lo quiere tendrá que ser más rápido que el PSG y el Manchester City.