Cristiano Ronaldo intentó a la desesperada volver al Real Madrid, y lo hizo nada más y nada menos que en tres ocasiones. La primera fue en verano de 2021, después de presentar a la Juventus de Turín una solicitud para cambiar de aires. Estaba muy decepcionado con el rumbo que había tomado el proyecto, y se había cansado de su vida en Italia, y evidentemente su prioridad número 1 en todo momento era regresar a España.

Pero finalmente fue descartado por Florentino Pérez, y no tuvo más remedio que firmar con el Manchester United. Después de solamente un año en la Premier League, nuevamente quiso hacer las maletas. En su segunda etapa en Old Trafford no acabó de encontrarse cómodo por los pobres resultados obtenidos, y pidió a Jorge Mendes que hiciera todo lo posible para lograr que en el Santiago Bernabéu le abrieran las puertas, sin éxito alguno.

También probó suerte llamando al Barça y al Atlético de Madrid, aunque acabó quedándose en Inglaterra. Hasta que por fin consiguió obtener la carta de libertad en enero, después de vivir un infierno en los últimos meses, donde no tuvo minutos a las órdenes de Erik Ten Hag, y se convirtió en un problema en el vestuario. Y, otra vez, se ofreció para vestir de blanco, encontrándose con la misma respuesta de antes. Todo, por culpa de Carlo Ancelotti.

Carlo Ancelotti serio durante un entrenamiento del Real Madrid / Foto: Europa Press
Carlo Ancelotti/ Foto: Europa Press

Y es que había gente en el Madrid que veía con buenos ojos dar una segunda oportunidad a CR7. Por ejemplo, el presidente le valoraba como una alternativa interesante para el ataque, donde había muchas bajas, y varios futbolistas no entran en los planes, como son los casos de Eden Hazard o de Mariano Díaz. Sin embargo, ‘Carletto’ se mostró firme, y no quería saber nada del ex del Sporting de Portugal, que se marchó a Arabia Saudí para defender los colores del Al-Nassr de Mohammed Bin Salmán.

Las razones que puso el italiano fueron simples: creía que ya estaba en un momento de declive, y no podría aportar absolutamente nada al equipo. Y tenía dudas de que el astro portugués pudiera asumir sin rechistar un papel secundario.

Ronaldo, traicionado por Ancelotti

Sabiendo esto, es lógico hablar de traición. Porque Ronaldo y Ancelotti tenían una magnífica relación después de coincidir durante dos años en el Madrid, y confiaba en que fuera uno de sus grandes valedores para poder regresar.

Nada más lejos de la realidad.