El futuro de Marcus Rashford se aleja del FC Barcelona. El delantero inglés, que había mostrado públicamente su deseo de jugar en el club azulgrana y que incluso había rechazado ofertas de Arabia Saudí y de la Juventus esperando al Barça, ha visto cómo su posible fichaje entra en punto muerto. El motivo: el Barça tiene ahora otras prioridades en el mercado, y Rashford ya no es una opción prioritaria para Deco y Hansi Flick.
Desde el club azulgrana se reconoce que todos los esfuerzos están centrados en el fichaje de Luis Díaz, extremo colombiano del Liverpool que cuenta con el respaldo total del cuerpo técnico y de la dirección deportiva. Además, Rafael Leao también gusta mucho y su perfil encaja más con lo que busca Flick para reforzar la delantera: potencia, desborde y gol.
El caso de Rashford, por tanto, se enfría por varios motivos. Primero, porque no genera consenso dentro del club. Algunos sectores valoran su experiencia y polivalencia, pero otros dudan de su rendimiento irregular en los últimos tiempos y de su impacto inmediato. Segundo, porque el Manchester United no contempla una cesión —la fórmula que más convence al Barça debido a sus limitaciones económicas— y exige un traspaso cercano a los 50 millones de euros, cifra completamente fuera del alcance de la entidad culé en estos momentos.
Rashford, decepcionado y sin respuestas
Fuentes cercanas al jugador aseguran que Rashford está decepcionado con la falta de movimientos concretos por parte del Barça. Esperaba una oferta formal o al menos un plan claro, pero se ha encontrado con evasivas y una clara prioridad hacia otros perfiles. Con el inicio de la pretemporada a la vuelta de la esquina, el atacante no quiere esperar mucho más y empieza a valorar seriamente otras propuestas que tiene sobre la mesa.
Su entorno empieza a asumir que el sueño de vestir de azulgrana puede no cumplirse este verano, salvo un giro inesperado en las negociaciones con los otros objetivos ofensivos del Barça.
Deco, centrado en Luis Díaz y Leao
Mientras tanto, Deco sigue trabajando en cerrar cuanto antes la llegada de Luis Díaz, un fichaje estratégico para el proyecto de Flick. El club confía en que el Liverpool rebaje sus pretensiones económicas si consigue cerrar el fichaje de Alexander Isak, lo que obligaría a hacer caja. En paralelo, Leao también sigue en el radar, aunque su alto coste lo mantiene como una opción más complicada.
En este contexto, Rashford queda congelado, a la espera de si alguna de las otras operaciones se cae. Pero, a día de hoy, su fichaje por el Barça está más lejos que nunca. Y el tiempo empieza a jugar en su contra.