La situación de Gavi en el FC Barcelona da un giro importante de cara a la nueva temporada. Si bien el curso pasado el joven andaluz tuvo menos protagonismo del esperado por culpa de las lesiones y la fuerte competencia en el centro del campo, Hansi Flick ha tomado una decisión clara: quiere que el internacional español sea una pieza clave.
Durante la pretemporada, Gavi ha sido uno de los jugadores que más ha convencido al nuevo técnico azulgrana. Su intensidad, compromiso y capacidad para adaptarse a distintas posiciones han impresionado a Flick, que ya ha transmitido internamente que cuenta con él como titular habitual o, al menos, como un jugador que tendrá una presencia muy destacada a lo largo del curso.
El técnico alemán considera que Gavi puede marcar diferencias, sobre todo en partidos de alto ritmo y exigencia física. Su agresividad, su habilidad para recuperar balones y su energía constante encajan perfectamente en el estilo de presión alta que Flick quiere implantar en el Barça. Además, el jugador ha demostrado estar completamente recuperado de sus problemas físicos, y su madurez pese a su juventud es un valor añadido.
Un cambio respecto al año pasado
La decisión de Flick rompe con la tendencia de la temporada pasada, en la que Gavi quedó relegado en muchas ocasiones por detrás de jugadores como Pedri, Frenkie de Jong o incluso Casadó.
Este año, sin embargo, todo apunta a un cambio real en su estatus. En los entrenamientos y amistosos veraniegos, Gavi ha sido uno de los futbolistas más activos, mostrándose con carácter, calidad y liderazgo. Flick lo valora no solo por lo que aporta en el campo, sino también por su conexión con la afición y su fuerte identidad con el club.
Competencia, pero confianza
La medular culé sigue estando muy poblada, con nombres de peso como Pedri, De Jong, Bernal o Fermín, pero Flick ha dejado claro que habrá minutos para todos y que Gavi tendrá un papel protagonista. El técnico confía en su evolución y considera que esta temporada puede dar el salto definitivo para convertirse en un líder del equipo.
Con un contrato largo y una cláusula de rescisión elevada, Gavi no se plantea moverse del Barça. Su única obsesión es triunfar en el club de su vida. Y esta vez, todo indica que tendrá la oportunidad de hacerlo desde el césped, no desde el banquillo.