El Betis tiembla por la continuidad de sus grandes estrellas. La fantástica recta final de temporada que han completado, que ha provocado que se queden muy cerca de clasificarse a la Champions League y que estén en la final de la Conference League, ha provocado que muchas de sus figuras se encuentren en la agenda de los clubes más poderosos del continente. Y un ejemplo de ello es Antony dos Santos, quien está cedido por el Manchester United.
La gran prioridad de la directiva verdiblanca es poder retener al internacional brasileño, pero cada vez parece más complicado que esto suceda, debido al elevado coste que tendría la operación, y a las ofertas que ya ha recibido. Asimismo, también sucede una cosa similar con Nathan, quien a priori tendría que regresar al SSC Napoli cuando finalice el presente curso. Y no nos podemos olvidar de otras piezas fundamentales para Manuel Pellegrini, como Johnny Cardoso o Sergi Altimira.
Y, por supuesto, aquí también es obligatorio mencionar el nombre de Jesús Rodríguez, una de las grandes revelaciones de todo el panorama continental. En cuestión de unos pocos meses ha pasado de ser considerado como una joven promesa de futuro, y de ser un completo desconocido, a estar entre los mejores extremos de La Liga EA Sports. Y todo esto, con tan solo 19 años de edad, así que el margen de progresión que tiene por delante es sensacional.
Una cosa que le ha valido para que entidades como el Barça se hayan comenzado a plantear la posibilidad de apostar por su incorporación. A pesar de que renovó su contrato hace unos pocos meses, tiene una cláusula de rescisión que rondaría los 35 millones de euros, y que es muy llamativa. Y Joan Laporta y Deco ya han comenzado a negociar con sus agentes, para tantear la posibilidad de incorporarlo al proyecto de Hans-Dieter Flick.
Buscan a un nuevo complemento para la parcela ofensiva, y desde el Camp Nou están convencidos de que el diamante sevillano podría ser un refuerzo muy útil e interesante.
En el Betis confían en poder retener a Jesús
Como es evidente, en el Betis existe una enorme preocupación por la posible despedida de Jesús, quien ya se ha convertido en uno de los grandes ídolos de la afición en muy poco tiempo.
Pero en el Benito Villamarín confían en poder lograr retenerlo en sus filas, al menos durante un año más, a pesar del interés del Barça y de otros equipos top.