El FC Barcelona atraviesa un momento complicado en la defensa. El equipo encaja demasiados goles. Y no todo es culpa de Wojciech Szczęsny o de las bajas. Ronald Araújo, que con Xavi Hernández era un referente indiscutible, empieza a ver cómo su posición se tambalea. La directiva y el cuerpo técnico buscan soluciones, y su nombre ya no es intocable.
El uruguayo sigue siendo un jugador con presencia física y capacidad de liderazgo, pero sus errores en la salida de balón y algunos problemas físicos han encendido las alarmas. El club necesita defensores que ofrezcan seguridad constante y se adapten al estilo moderno de juego, y la sensación es que Araújo no siempre cumple esos requisitos.
El Barça busca un central
En este contexto, Deco, director deportivo, trabaja a puerta cerrada para reforzar la zaga. La intención es incorporar un central que combine solidez, juventud y proyección táctica. La prioridad es que la defensa recupere consistencia y que los movimientos del equipo no se vean comprometidos.
El nombre que ha ganado fuerza, según apunta el portal e-noticies, es Nico Schlotterbeck, central alemán del Borussia Dortmund. Sus actuaciones en la Bundesliga lo han convertido en uno de los defensores más completos del continente. Su estilo se ajusta al que busca Flick, con salida limpia desde atrás y presencia en cada acción defensiva. A sus 25 años, Schlotterbeck representa un perfil ideal para reforzar el proyecto azulgrana.
El problema es el precio. Se habla de una operación que superaría los 40 millones de euros, una cifra importante, pero asumible si se considera la mejora que aportaría al equipo. La negociación estaría en marcha y todo apunta a que el club buscará cerrar el acuerdo en la ventana de invierno.
Ronald Araújo, daño colateral
Para Araújo, la situación es un aviso. Su titularidad ya no está garantizada. La llegada de un defensor de primer nivel genera presión directa. El uruguayo deberá adaptarse, mejorar su rendimiento y demostrar que merece seguir siendo un pilar del Barça. De lo contrario, podría verse forzado a buscar minutos en otro club.
De producirse la operación, Schlotterbeck tomará un rol protagónico, y Araújo tendrá que luchar por su lugar. En el club la titularidad se gana semana a semana. Y su futuro dependerá de su capacidad de respuesta en el campo.