Dos goles de Luis Suárez y uno de Paulinho resuelven otro partido gris del Barça. Los blaugrana ganan con servicios mínimos contra el Leganés y evidencian un problema de juego que amenaza con convertirse en estructural (0-3). Ter Stegen vuelve a salvar al líder de Primera y al equipo menos goleado de Europa.

Butarque por delante de Turín

Ernesto Valverde ha vuelto a ser fiel a su discurso y no se ha guardado nada. En la previa, el técnico avisó de que sólo lo preocupaba el partido de Leganés, sin pensar en la Juventus de Turín o el Valencia. Y es por eso que Gerard Piqué y Samuel Umtiti han empezado de titulares a pesar de estar a una tarjeta de la suspensión.

El Barça ha salido con todo para dejar el 'virus FIFA' en un resfriado. El equipo, sin embargo, ha caído en la telaraña defensiva del Leganés. Los madrileños han sabido contrarrestar y vigilar a un Leo Messi que se perdía entre camisetas de color morado. La mirada del '10', confusa en el círculo central, era el peor síntoma de un equipo incapaz de disparar entre los tres palos.

Paco Alcácer, otra vez desde la banda, era de las pocas notas positivas del primer tramo de partido, junto con Jordi Alba, en la línea ascendente de los últimos partidos. Andrés Iniesta no entraba en contacto con la pelota y el Barça se resentía. El Leganés esperaba, con las líneas muy juntas, y buscaba balonazos largos hacia su delantero, Nordin Amrabat. Una idea simplista ejecutada a la perfección.

El Barça ha encontrado el gol cuando menos lo ha merecido. Cuéllar, portero de los madrileños, ha regalado el 0-1 a Luis Suárez después de rechazar mal un disparo de Alcácer. Suárez rompía una sequía de 479 minutos sin marcar con uno de los goles más sencillos de su carrera. El equipo no merecía el resultado y Ter Stegen, otra vez, ha sido el mejor guardián del premio.

El portero alemán se ha lucido con una parada al disparo de Szymanowski. El 0-1 era la mejor noticia de un Barça que echaba demasiado de menos el talento de Messi, aislado y ausente. Además, Piqué ha visto la amarilla por una falta muy discutible. Sancionado. Mestalla verá una pareja de centrales inédita.

Doble cambio

La segunda parte no ha servido para revitalizar al Barça. El Leganés aceptaba el guion del partido, porque se chocaba con las manos de Ter Stegen en la mayoría de los ataques, impecable en todas las jugadas. El portero se agiganta con el paso de las jornadas, marcando diferencias que se traducen en puntos. Muchos puntos.

Valverde ha buscado revolucionar el equipo desde la banda. Y su doble cambio ha coincidido con el 0-2. Aleix Vidal y Paulinho han visto desde el campo cómo Suárez volvía a cazar un rechazo de Cuéllar para marcar su segundo gol de la tarde con un remate acrobático. Partido decidido a falta de 30 minutos. El resultado por delante del fútbol..

El doblete de Suárez ha anestesiado Butarque, que animaba más por inercia que por convencimiento. El Barça se centraba en mantener la ventaja y en ver cómo se descontaban minutos hasta el 90. El tramo final, como el fútbol de los blaugrana, ha pasado desapercibido, pero Paulinho ha vuelto a aprovechar su oportunidad haciendo el 0-3 a placer.

A pesar de las sensaciones, muy mejorables, el Barça sigue haciendo camino: 11 victorias y 1 empate en 12 jornadas para consolidarse como líder de Primera División. Además, el equipo alarga la racha de imbatibilidad y encadena 17 partidos sin perder. Los números están con Valverde. El juego, de momento, no.