El Barça ha anunciado el despido del pívot norteamericano Joey Dorsey, a raíz de un mensaje publicado por el jugador en Instagram en el cual ponía en duda el trabajo de los servicios médicos del club blaugrana.

Después de que el técnico, Giorgios Bartzokas, manifestara que Dorsey "tenía que jugar mucho mejor", el pívot respondió con un mensaje en la red social Instagram en la que daba su versión de los hechos.

"El año pasado sufrí una distensión de casi todos los ligamentos del tobillo jugando en el 'Top 8' contra el Lokomotiv, El doctor del equipo me dijo que sólo era un esguince. Me presionaron para volver e intentar jugar", dijo.

Dorsey aseguró que posteriormente le anunciaron que tenía "un edema en los tejidos blandos" del tobillo, que provocaba que se le entumeciera el pie y tuviera que dar por finalizada la temporada.

"Esta temporada ha sido la más dura de mi carrera por intentar jugar lesionado y sin estar a punto para jugar a mi mejor nivel. Alguna vez he estado a punto de abandonar un partido porque la lesión afectaba a mi juego y mi mentalidad. El equipo no me dejó descansar hasta que estuviera bien para volver a ser el todopoderoso Dorsey", dijo.

En aquel mensaje, Dorsey daba la gracias a los aficionados por el ánimo que le han dado en todo momento. "Sin vuestras palabras habría tirado la toalla. Pero he trabajado duro día y noche para ayudar al equipo", aseguró.

Después de aquel mensaje el club le abrió un expediente disciplinario y pocos días después se hizo oficial el fichaje del pívot Vitor Faverani.