El 'pupas' ya no es el 'pupas'. El Atlético de Madrid por fin se hace grande y gana al Real Madrid, su eterno rival, en una final europea. En el recuerdo ya quedan aquellas finales de Champions porque ahora la venganza ha llegado con una Supercopa de Europa que es colchonera.

Gran partido en ritmo, en fútbol y en espíritu. Diego Costa ha mantenido vivo al Atlético con un doblete, y los goles de Saúl y Koke en la prórroga han sentenciado un partido que han animado Benzema y Sergio Ramos. El Atlético no conoce la derrota en la Supercopa y ya levanta el tercer título.

Estocada y estocada

Empieza a rodar el balón, corre Diego Costa por la banda derecha del ataque, entra dentro del área del Madrid y fusila a Keylor Navas. Sólo habían pasado 55 segundos del partido cuando ha llegado la primera estocada. El Atlético ha salido a por todas y no ha dado aire a su rival.

Un primer golpe al partido muy tempranero que hacía vibrar a todo el estadio de Tallin, en Estonia, como también haciendo saltar al Mono Burgos, entrenador colchonero accidental, como también al sancionado Diego Simeone desde la grada. Momentos de esperanza para el Atlético en una nueva final europea que contra su eterno rival que se les volvía a poner de cara.

Pero el golpe no ha sido suficiente para tumbar a un Madrid tocado, pero que ha sabido reponerse a base de balón. Tocando de lado a lado, combinando sin dejar oler la pelota a los colchoneros y creando mucho peligro entre Bale y Asensio. Dos futbolistas que han puesto el miedo al cuerpo antes que el cazador Benzema empatara el partido de cabeza antes de la media hora de partido.

Minutos para recapitular y poner las cartas sobre la mesa. El Madrid tocaba sin cesar y el Atlético esperaba su oportunidad. Agresividad y buen fútbol, a pesar que a veces faltado de ritmo.

Inevitable prórroga

Y después han pasado los minutos, los futbolistas han ido notando sus carencias físicas y han llegado las primeras imprecisiones. El partido ha sido una lucha contra los propios errores, y por este motivo se ha vuelto a mover el marcador.

Primero ha sido Juanfran que ha tocado la pelota con la mano. Penalti a favor del Madrid y Sergio Ramos no falla. Era el minuto 63, pero no se había acabado el partido. En el 79, cuando los blancos empezaban a pensar en levantar el título, ha aparecido nuevamente Diego Costa, que ha resuelto una jugada enrevesada y con un cúmulo de errores dentro del área del Madrid para forzar la prórroga.

La magia de Saúl

Pero si todo el mundo pensaba que en las prórrogas el Real Madrid es infinitamente superior al Atlético, en esta ocasión no ha sido así. Los de Simeone han sacado su fuerza, su espíritu guerrero, pero también su calidad para sentenciar el primer título de la temporada para los colchoneros.

Saúl Ñíguez ha hecho una obra de arte de volea desde dentro del área y ha marcado un auténtico golazo para encarrilar la final. Eso era el minuto 98 del partido, seis minutos antes de la sentencia. Entonces ha habido una jugada de combinación del Atlético que Koke ha sabido sentenciar desde dentro del área. Cuatro goles al Madrid de Julen Lopetegui en su debut oficial.

El Atlético levanta el primer título de la temporada y le pasa la mano por la cara a su eterno rival. Los colchoneros no han sido superiores en fútbol, pero sí en trabajo. El Madrid empieza cabizbajo y el Atlético ya puede decir que también gana a los blancos en Europa.