El Deportivo de La Coruña atraviesa turbulencias internas en un momento clave de la temporada. A pesar de mantenerse en zona de playoff, el equipo de Antonio Hidalgo ha encadenado cuatro partidos sin conocer la victoria y solo ha sumado dos puntos de los últimos doce posibles. Pero más allá de los números, el verdadero foco está puesto sobre un nombre: Yeremay Hernández, el jugador que hace unos meses era considerado el diamante más brillante del club, y que hoy parece perder brillo en medio de los rumores de traspaso y una crisis de rendimiento que ya ha hecho saltar las alarmas.

El técnico no ha dudado en actuar. Según fuentes del vestuario, Hidalgo ha llamado al orden a Yeremay, cansado de su desconexión y de su bajo impacto en el juego ofensivo. La situación preocupa incluso a Luis de la Fuente, quien sigue de cerca la evolución del canario ante la posibilidad de incluirlo en la prelista del próximo Mundial 2026. Pero el seleccionador no concede regalos: si el ‘10’ no levanta cabeza o no da el salto a un equipo de élite, su sueño mundialista podría esfumarse.

Yeremay Hernández

Yeremay, del brillo a la sombra: la metamorfosis del ‘10’ deportivista

Todo comenzó en verano, cuando Yeremay rechazó una oferta de 35 millones del Sporting de Portugal para continuar en A Coruña. Su decisión, celebrada como un acto de amor al club, se ha convertido en un arma de doble filo. Con la llegada de Hidalgo al banquillo, el jugador ha sido desplazado de su posición natural en banda izquierda a una zona más centrada y adelantada. El experimento, de momento, no ha dado los resultados esperados.

La pasada campaña fue su consagración: 15 goles, 5 asistencias y una colección de regates imposibles que lo catapultaron como el jugador más valioso de Segunda División. Sin embargo, esa chispa parece haberse apagado. Este año, Yeremay suma los mismos tres goles que a estas alturas del curso anterior, pero dos son de penalti y ninguno ha llegado por una jugada individual. La ausencia de asistencias —cuando en 2024 ya llevaba dos— y la pérdida de protagonismo en el ataque son reflejo de una caída que preocupa dentro y fuera del vestuario.

Yeremay/ Deportivo de la Coruña

Hidalgo exige compromiso y De la Fuente no pierde detalle

En los entrenamientos, el ambiente se ha tensado. Hidalgo ha expresado claramente al entorno del club que, para que el equipo mejore, necesita que Yeremay recupere el nivel que mostró la temporada anterior. El jugador, por su parte, intenta adaptarse a la nueva posición, aunque las estadísticas lo dejan en evidencia. Ha pasado de 57 regates exitosos a solo 27, cayendo del primer al tercer puesto en este apartado, superado por Larrubia y Duk. Incluso en el plano defensivo, sus números se han desplomado: de 26 recuperaciones en campo rival a tan solo 10.

Los datos reflejan lo que los ojos ya perciben: Yeremay está fuera de ritmo. Su efectividad de tiro también ha caído del 30% al 25%, y su número de fueras de juego se ha multiplicado por seis. Señales inequívocas de un jugador que se encuentra desubicado. Mientras tanto, De la Fuente mantiene su atención puesta en el canario. El seleccionador español lo considera un talento de futuro, pero advierte que solo tendrá opciones reales de vestirse de rojo si recupera su mejor versión o da el salto a un club de Primera antes del verano de 2026.