Unas pegatinas de Ana Frank con la camiseta de la Roma en la curva del Estadio Olímpico han sido el detonante de una condena enérgica y colectiva de la sociedad italiana al comportamiento de los ultras en el mundo del fútbol.

Durante el Lazio-Cagliari, algunos de los seguidores más violentos de la Lazio inundaron una parte del fondo sur del estadio que comparten con la Roma con fotografías de Ana Frank luciendo la camiseta de su eterno rival. El gesto, de muy mal gusto, le puede salir muy caro al club, a pesar de la rápida reacción de su presidente Claudio Lotito, que entregó un ramo de flores en la sinagoga de Roma y prometió un viaje anual a 200 seguidores jóvenes a Auschwitz para concienciarlos de la magnitud del holocausto.

Los ultras de la Lazio no han encontrado ningún tipo de apoyo a su iniciativa contra el Cagliari. Representantes de la Federación de Fútbol Italiana y la política han manifestado su indignación y han anunciado medidas para identificar y sancionar a los responsables. Ya hay una investigación en marcha para poner nombre a las "pocas manzanas podridas", tal y como los denominó Simone Inzaghi, entrenador de la Lazio.

La imagen de Annelies Marie Frank, que se escondió durante dos años en una casa de Amsterdam para acabar muriendo en 1945 en el campo de concentración de Bergen-Belsen, ha despertado todas las consecuencias. "Es inhumano y alarmando para todo al país", ha manifestado el presidente de la República italiana Sergio Mattarella.

El fútbol no dará la espalda al gesto de los radicales de la Lazio y reaccionará con una iniciativa que inundará de libros los estadios. Y es que los campos de fútbol, desde la Serie A hasta las categorías inferiores, leerán un fragmento del 'Diario de Ana Frank' y 'Si esto es un hombre' de Primo Levi antes de los partidos que se disputen en las dos próximas jornadas. "La invitación a leer estos libros es para todos los jóvenes, con la esperanza de que las nuevas generaciones crezcan con los valores y los ideales que llenan las páginas de estas obras maestras", asegura la Liga italiana.

La Lazio, para separarse de las ocurrencias racistas y antisemitas de sus ultras, ha decidido saltar al césped en el partido de esta noche contra el Bolonia con una camiseta especial para la ocasión, luciendo una fotografía de Ana Frank. El fútbol, en este caso, ha demostrado estar a la altura de las circunstancias.