El mercado de fichajes da un nuevo giro que podría beneficiar al FC Barcelona. Según fuentes cercanas al club, el Liverpool está decidido a lanzar una ofensiva final por Alexander Isak, el delantero sueco del Newcastle. Una operación que superaría los 100 millones de euros y que dejaría a los ‘reds’ al límite de sus posibilidades económicas, obligándoles a hacer caja de forma urgente.
El conjunto inglés, que ya ha invertido más de 200 millones de euros en este mercado con las llegadas de Florian Wirtz, Jeremie Frimpong y Milos Kerkez, sabe que la incorporación de Isak solo será viable si hay salidas importantes. En ese contexto, el nombre de Luis Díaz vuelve a escena, y el Barça está preparado para aprovechar la situación.

Oportunidad de mercado
Desde hace meses, Luis Díaz es uno de los jugadores que más gustan a la dirección deportiva del Barça. Su perfil explosivo, polivalente y desequilibrante encaja con lo que busca Hansi Flick para reforzar el ataque. Sin embargo, hasta ahora, el precio impuesto por el Liverpool —cercano a los 80 millones— ha sido un muro infranqueable.
Ahora todo podría cambiar. Con el fichaje de Isak prácticamente sobre la mesa, el Liverpool tendría que rebajar su postura y aceptar una cifra mucho más asumible si quiere cuadrar cuentas sin infringir el Fair Play Financiero. En ese contexto, el Barça confía en poder negociar por una cifra cercana a los 60 millones, una cantidad que entraría dentro de los parámetros que maneja el club catalán si logra cerrar algunas ventas estratégicas.
Deco, atento al movimiento
El director deportivo del Barça, Deco, ya ha activado los contactos con el entorno del futbolista colombiano, que sigue dando prioridad a un posible desembarco en el Camp Nou pese al interés que ha generado en otros clubes europeos. Luis Díaz, que también era objetivo del Bayern de Múnich, prefiere vestir de azulgrana si finalmente el Liverpool abre la puerta.

Además, desde el entorno del jugador aseguran que Luis Díaz está dispuesto a poner de su parte para facilitar la operación, ya que considera que su etapa en la Premier League ha llegado a su fin y ve el proyecto del Barça como un paso ideal en su carrera.
Operación encadenada
La llegada de Isak al Liverpool no solo puede desbloquear la llegada de Luis Díaz al Barça, sino que también puede marcar el ritmo final del mercado culé. El club necesita reforzar el ataque y quiere hacerlo con inteligencia económica. Si todo encaja, Luis Díaz puede ser el gran beneficiado de un efecto dominó que empieza en Newcastle y pasa por Anfield, para terminar en el Camp Nou.