Ronald Araújo ha ido perdiendo progresivamente su lugar en la rotación defensiva del equipo. Lo que hasta hace poco parecía impensable, hoy es una realidad: el central se encuentra claramente por detrás de compañeros como Pau Cubarsí, Iñigo Martínez, Eric García y Andreas Christensen. Esta jerarquía, definida ya por el nuevo cuerpo técnico encabezado por Hansi Flick, refleja que el perfil de Araújo no se ajusta a las exigencias tácticas del entrenador alemán, que prioriza una defensa más asociativa, más enfocada en la salida de balón y con lectura táctica más afinada.

El rendimiento de Araújo en esta temporada ha sido, además, notablemente inferior al de cursos anteriores. Si bien comenzó el año lesionado, varios errores puntuales a su vuelta han ido marcando su curso. Los más significativos tuvieron lugar en el partido frente al Inter de Milán, donde quedó claramente expuesto en los dos últimos goles del equipo italiano.

Ronald Araújo cava su tumba contra el Inter de Milán

Aquella actuación no solo tuvo consecuencias en lo deportivo, sino también en la percepción interna del club sobre su fiabilidad. El recuerdo de su expulsión frente al PSG en la temporada anterior, en un duelo clave de Champions League, todavía está muy presente en la mente del barcelonismo. Aquel error fue catalogado como el momento que selló la eliminación del equipo dirigido entonces por Xavi Hernández.

Ronald Araujo enfadat Barça / Foto: EFE
Ronald Araujo enfadat Barça / Foto: EFE

Pero los problemas no se han limitado al campo. En el vestuario, Araújo también ha ido perdiendo terreno. Sus declaraciones posteriores a la derrota frente al Inter fueron recibidas con gran malestar tanto entre sus compañeros como en la dirección deportiva. En lugar de asumir su responsabilidad en la fragilidad defensiva mostrada, optó por señalar indirectamente a otros jugadores, aludiendo a la falta de cobertura en el cuarto gol encajado. Además, trató de justificarse en el tercero, asegurando que su posicionamiento había sido correcto. Desde el área técnica, Deco y su equipo interpretaron estas palabras como una clara muestra de falta de autocrítica, y una señal preocupante de escaso compromiso colectivo.

El pasado domingo, en un nuevo capítulo de su caída, ni siquiera tuvo minutos. Al margen de que vio una tarjeta amarilla mientras estaba en el banquillo y Flick no quería arriesgarse a una expulsión, la decisión respondió más al temor del técnico de que un nuevo error de Araújo pudiera comprometer el resultado y hundir psicológicamente al futbolista.

Ronald Araujo defensa davant Acerbi durant l'Inter - Barça de Champions League / Foto: EFE
Ronald Araujo durante el Inter - Barça de Champions League / Foto: EFE

Con pie y medio fuera del Barça

Consciente de la situación, Araújo ha optado por mover ficha. El central considera que su etapa en el club ha terminado y está abierto a un cambio de aires. De hecho, ya valoró marcharse en invierno, pero la directiva y el cuerpo técnico le pidieron que se quedara tras una lesión de Íñigo Martínez. Consciente de que tendría más minutos, el jugador aceptó y renovó, aplazando su decisión al mercado estival en función de como se desarrollaban los meses posteriores. Pero su rendimiento ha sido muy bajo. Y tampoco ha logrado ganarse un puesto en el once titular.

A sabiendas de que no tendrá los minutos ni protagonismo, ha solicitado a su representante que empiece a escuchar ofertas. Precisamente, ya se le puso una cláusula de rescisión 'asequible' de 65 millones de euros que abría la puerta a esta posibilidad. Y equipos de peso en Europa, como el Bayern de Múnich y la Juventus, ya han manifestado un interés real en hacerse con sus servicios.

Ronald Araujo i Lewandowski, decebuts durant el Barça - Betis / Foto: EFE
Ronald Araujo y Lewandowski durante el Barça - Betis / Foto: EFE

Su salida dejará un vacío emocional importante en jugadores como Robert Lewandowski, Ansu Fati o Gavi, quienes tienen la mejor relación con el uruguayo dentro del vestuario. En especial Lewandowski, que también atraviesa una etapa de incertidumbre con Flick, pierde así a uno de sus principales apoyos dentro del grupo azulgrana.