Sergio Busquets se acaba de convertir en un nuevo miembro del selecto club de jugadores que han jugado 500 partidos con la camiseta blaugrana.

El de Badía es el séptimo jugador que alcanza esta cifra, y es que hasta ahora sólo Xavi (767 partidos), Iniesta (675), Messi (650), Puyol (593), Migueli (549) y Valdés (539) habían roto la barrera de los 500 partidos. Con 30 años y un contrato hasta el 2023, el mediocampista está en condiciones de, como mínimo, superar a Valdés y Migueli.

Este sábado, una leyenda del Manchester United como Rio Ferdinad ha compartido un vídeo en sus redes sociales para alabar su gran lectura del juego.

Un palmarés envidiable

Desde su debut la temporada 2008/09 de la mano de Pep Guardiola, Busquets ha jugado 500 partidos y ha sumado 28 títulos. Después de aquel mítico 1-1 contra el Racing de Santander que despertó tantas dudas y donde Busi fue titular, el mediocampista ha conseguido 7 Ligas, 3 Champions League, 6 Copas del Rey, 6 Supercopas de España, 3 Supercopas de Europa y 3 Mundiales de Clubs.

Evidentemente, la competición donde ha disputado más partidos ha sido la Liga (323), seguida por la Champions (98) y la Copa (56). Lo más espectacular, sin embargo, es que en todos los torneos dónde ha participado ha tenido un papel clave, y desde la salida de Touré Yaya la temporada 2009/10, ha sido uno fijo indiscutible en el once titular del equipo.

De Tercera a capitán

Sergio Busquets fue una apuesta personal de Pep Guardiola, que le dio la alternativa cuando él era jugador del filial en Tercera División. Aunque el de Badía no era uno de los jugadores destacados del fútbol base, pronto se apoderó de la medular del equipo gracias a su impecable colocación, su capacidad para recuperar pelotas y su buen dominio de la posesión. Su influencia fue tan grande que el catalán acabó quitándole el sitio a una estrella consagrada como Touré Yaya.

A medida que se ha hecho grande, Busquets ha asumido responsabilidades progresivamente. Del dorsal 28 al 16 y del 16, al 5 del mítico Carles Puyol. Su influencia en el terreno de juego se ha traducido en el vestuario, donde es el segundo capitán por detrás de Leo Messi.