Desde el Barça saben que están haciendo mucho trabajo, pero que todavía tienen que hacer más en los próximos días y semanas. Hay optimismo dentro del club culé, pero también es cierto que hay que seguir haciendo limpieza de la plantilla antes de poder hacer grandes fichajes. Y, en este sentido, Joan Laporta tiene que continuar con firmeza y con ganas de ser positivo.
Ansu Fati no ha convencido
A todo eso, desde el club blaugrana se tiene que encontrar una solución urgente. Y es en el caso del futuro de Ansu Fati. El Barça tenía en mente la venta del delantero culé, pero las cosas no van por el camino que habrían querido. Este verano se tiene que hacer una gran venta y la opción de Ansu Fati cada vez pierde más fuerza.
Es una realidad que la temporada de Ansu Fati ha sido decepcionante. Se esperaba mucho más de él, pero las lesiones han frenado la enorme progresión del delantero. Y por este motivo desde el Barça han pensado en dejarlo marchar. Se ha convertido en un suplente habitual e insatisfecho dentro del vestuario dirigido por Xavi Hernández.
Ansu Fati no quiere marcharse del Barça
Y como Laporta había tomado la decisión de poner a Ansu Fati en el mercado después de haberlo defendido durante mucho tiempo, ha tenido que recibir una respuesta. Y esta ha sido negativa. Aunque la idea era una venta por 60 millones, por 50, o incluso, por 40, no ha habido buenas sensaciones desde el primer momento.
El Barça siempre ha deseado lo mejor para Ansu Fati, pero ya ha visto cómo el futbolista no ha vuelto a ser el de antes. La idea del club blaugrana ha sido buscar lo mejor para las dos partes, pero ahora no están de acuerdo. Si el Barça quiere una venta, el futbolista no quiere marcharse. Ya hace un año anunció su intención de quedarse y se salió con la suya. Y ahora se ha repetido.
Y como Ansu Fati no quiere irse y todavía tiene contrato, no lo pueden echar. Pero es que además tampoco tiene ofertas con el mínimo requerido para forzar el adiós. Inmovilismo y falta de argumentos en una venta que cada vez es menos venta.
Y eso quiere decir que el Barça tendrá que mirar hacia otro lado y asegurarse alguna otra venta de unos cuantos millones. Ansu Fati tendrá que seguir intentando convencer a todo el mundo mientras nadie cree que pueda ser titular. Un futbolista que ha ido de más a menos y que todavía no ha recuperado la confianza de sus inicios en el fútbol profesional.