La dura eliminación del FC Barcelona ante el Inter de Milán en las semifinales de la Champions League ha dejado una lección clara en el entorno azulgrana: las porterías marcan la diferencia en este tipo de eliminatorias. Mientras Yann Sommer fue decisivo para los italianos con varias intervenciones de altísimo nivel, Wojciech Szczesny no consiguió ser un factor diferencial para el Barça. Y eso ha encendido todas las alarmas en los despachos del Camp Nou.
En las oficinas, Deco ha recibido presión directa para actuar. El director deportivo sabe que el club necesita soluciones inmediatas si quiere que el equipo dé el salto definitivo en Europa. Y el primer paso puede estar ya identificado: Joan García, el joven portero del Espanyol, cuyo rendimiento esta temporada ha sido espectacular.
Una cláusula que lo hace posible
Joan García, de solo 23 años, está considerado uno de los porteros con mayor proyección del fútbol español. Su campaña en el Espanyol ha sido brillante. Ágil, con grandes reflejos y personalidad bajo palos, ha despertado el interés de varios clubes de primer nivel. Pero el Barça parte con ventaja: su cláusula de rescisión es de 30 millones de euros, una cifra que desde el club consideran asumible en caso de que haya salidas este verano.

Para Deco, la operación está clara. Por ese precio, el Barça podría asegurarse un guardameta de primer nivel para muchos años, nacional, adaptado a LaLiga y con una capacidad demostrada para rendir bajo presión. En un mercado donde porteros top superan fácilmente los 50 o 60 millones, Joan García es una oportunidad de oro.
Una portería en revisión
Ter Stegen sigue siendo el dueño de la portería del Barça, pero tras su lesión esta temporada, han surgido dudas sobre el plan B. Szczesny llegó como solución de emergencia y, aunque tuvo buenos partidos, la semifinal ante el Inter ha dejado claro que no es el portero que puede marcar la diferencia en los partidos más grandes. Encajó siete goles entre ida y vuelta, y no realizó ninguna parada decisiva cuando el equipo más lo necesitaba.
El Barça no puede permitirse volver a fallar en un momento tan importante. Y si bien Ter Stegen recuperará la titularidad en breve, tener una alternativa real, joven y con potencial para competir por el puesto es prioritario.

Decisión inminente
Todo apunta a que en las próximas semanas Deco moverá ficha. La cláusula de Joan García es pública y el Espanyol sabe que retenerlo este verano será difícil si llega una oferta en firme. Más aún si es del eterno rival, algo que, sin embargo, no detendría a Joan si ve que puede dar un salto de calidad en su carrera.
El entorno del portero ve con buenos ojos la posibilidad de fichar por el Barça, aunque es consciente de que compartir vestuario con Ter Stegen supondría, de entrada, no ser titular indiscutible. Aun así, su ambición y el contexto actual podrían facilitar el acuerdo.
El Barça necesita aprender de Milán. En los partidos grandes, un portero marca la diferencia entre el éxito y la decepción. Deco lo sabe, y ahora tiene la oportunidad de actuar. 30 millones pueden cambiar el futuro del club bajo palos.