Partido para extraer pocas conclusiones, más allá del resultado. El Barça ha superado a un Éibar sin complejos gracias a Luis Suárez y Leo Messi. El primero ha abierto la lata y el segundo se ha encargado, otra vez, de mejorar a los compañeros.

Gerard Piqué y Samuel Umtiti se reivindican después de lesiones y sanciones como los mejores aliados de un Barça que juega el próximo martes contra el Chelsea en Londres. Philippe Coutinho sigue sin levantar el vuelo y desperdicia 30 minutos.

El 1x1 del Barça

Ter Stegen: Cumplidor

No ha tenido problemas para contener las llegadas del Éibar. Ha estado impecable en todas las acciones en las que ha intervenido con las manos y no ha cometido ningún error cuando se ha convertido en un central más para oxigenar la salida de balón.

Sergi Roberto: Maduro

Cada semana es un poco más completo. Valverde ha vuelto a demostrar que Sergi Roberto es algo más que el lateral titular del Barça. El futbolista de Reus tiene total libertad para eliminar rivales con conducciones y los compañeros se adaptan con un sistema de ayudas casi mecánico.

Gerard Piqué: Clave

Siempre es una garantía. En los días donde el rival explota al físico, él destaca por unir unas condiciones privilegiadas a una técnica depurada. Ha sido decisivo en las jugadas áreas y un salvavidas cuando el Barça pasaba por los peores minutos, encerrado en defensa. El equipo está de enhorabuena después de echarlo de menos contra el Getafe.

Samuel Umtiti: Rocoso

Partido sin fisuras. Ha vuelto a formar pareja con Piqué y el equipo lo ha notado. No ha tenido la espectacularidad de otros días, pero ha seguido alimentando su condición de central de primer nivel. Los delanteros del Éibar han acabado desesperados.

Jordi Alba: Tentado

El planteamiento del Éibar, acumulando muchos jugadores en el campo del Barça, ha regalado espacios a un Jordi Alba que no los ha desperdiciado. El lateral se ha desplegado siempre con criterio y ha coronado su notable partido con un gol en los últimos minutos.

Sergio Busquets: Apagado

No ha podido brillar por la falta de control del Barça. El equipo no ha encontrado la fórmula para esconder la pelota y sortear la presión asfixiante del Éibar. Los balonazos largos han jugado en su contra.

Ivan Rakitic: Lampista

Ha vuelto a solucionar los desajustes de los compañeros y se ha convertido en la primera línea para parar los constantes ataques de los vascos. En la primera parte, ha sido la solución de Valverde para acumular centímetros en los balonzos largos de Ter Stegen.

Paulinho: Gris

El decorado del partido parecía perfecto para su lucimiento personal. El 4-4-2 del Barça y el estadio de Ipurua tenían que constituir el mejor decorado para potenciar sus cualidades físicas. Paulinho ha decepcionado a Valverde porque no ha sido capaz de ayudar a un equipo que lo ha echado de menos. Ha sido el segundo y último cambio.

Andrés Iniesta: Reservado

El Barça ha sido incapaz de dominar la posesión contra un Éibar que prefería aparcar el medio del campo para jugarse los tres puntos en las áreas. La falta de claridad de los blaugrana con la pelota en los pies ha borrado del mapa a un Iniesta que ha durado poco más de 60 minutos sobre el campo.

Leo Messi: Indiscutible

Nadie puede mantener después de su partido en Éibar que no es el mejor del mundo. Ha inventado medio gol de Suárez con una asistencia inimaginable. Las condiciones del campo invitaban a ver un Messi menos definitivo y más creador. Ha interpretado la señal a la perfección e, incluso, ha estrellado una pelota al palo. La decimosexta de la temporada.

Luis Suárez: Aplicado

Suárez sabía que Dimitrovic, el portero del Éibar, va al suelo con mucha facilidad. Y es por eso que lo ha explotado en numerosas ocasiones hasta encontrar el gol. En el fútbol no todo es intuición y se notaba que el delantero uruguayo conocía los defectos del rival. Ha jugado un papel clave para oxigenar al equipo cuando la defensa estaba presionada.

Philippe Coutinho: Perezoso

Ha tenido casi media hora para reivindicarse en su competición, la Liga, pero la ha desperdiciado. Al jugador más caro de la historia del Barça se le tiene que exigir más que dos o tres pases de mérito. En algunas jugadas, sobre todo en defensa, ha transmitido una sensación de indolencia alarmante.

Aleix Vidal: Desagradecido

Ha entrado en los últimos minutos y ha tenido la oportunidad de enterrar el partido. Ha tenido todo el tiempo del mundo para hacer el 0-2 después de una genial asistencia de Leo Messi, pero su disparo ha impactado en las piernas de Dimitrovic. Necesita subir la voz si quiere que Valverde lo siga teniendo en cuenta en la rotación.