Joan Laporta tiene un sueño en este tramo final del mercado de fichajes: llevar a Rafael Leao al FC Barcelona. No es un objetivo fácil, pero en el fútbol, nada es imposible, especialmente cuando tienes a alguien como Jorge Mendes trabajando en ello. El presidente del Barça ha puesto su mirada en el talentoso extremo portugués del AC Milan, y aunque el precio es astronómico, Laporta está decidido a intentar lo impensable.
El AC Milan ha dejado claro que Leao está en el mercado, pero no a cualquier precio. La cifra que han fijado para dejar salir a su estrella es de 120 millones de euros, una cantidad que lo convertiría en uno de los traspasos más caros del verano. El club italiano sabe que Leao es su principal activo económico y quiere maximizar su valor antes de considerar cualquier oferta. Sin embargo, también están abiertos a negociar si algún club se acerca a esa cifra, lo que abre una pequeña ventana de oportunidad para el Barça.
Jorge Mendes, aunque no es el agente directo de Leao, tiene una buena relación con el jugador y ha comenzado a mover los hilos para facilitar la operación. Sabe que Leao encajaría perfectamente en el estilo de juego del Barça y está utilizando sus conexiones para tratar de acercar posturas entre el Milan y el club catalán. Sin embargo, el desafío es monumental. El Barça, limitado por el Fair Play financiero y la necesidad de ajustar su masa salarial, tendrá que ser muy creativo si quiere hacer realidad este fichaje.
Una de las opciones que el Barcelona podría considerar es incluir a algunos de sus jugadores en la operación para reducir el precio en efectivo. Nombres como Ansu Fati o Ferran Torres podrían ser utilizados como moneda de cambio para intentar abaratar el fichaje de Leao.
La presencia de Leao en el Barça no solo representaría un golpe de efecto en el mercado, sino también una respuesta a la creciente presión que el club está sintiendo con la llegada de figuras como Kylian Mbappé al Real Madrid. Laporta quiere volver a ilusionar a la afición culé y recuperar el protagonismo en la escena internacional.
A pesar de las dificultades, la confianza en Mendes podría ser el factor decisivo. El agente portugués tiene un historial probado de orquestar movimientos sorprendentes, y si alguien puede encontrar una manera de hacer que esta operación funcione, es él. Los próximos días serán cruciales para definir si este sueño puede convertirse en realidad. Mientras tanto, Laporta, el Barça y toda su afición mantendrán la esperanza viva, sabiendo que en el fútbol, hasta lo imposible puede suceder.