Los promotores del Museo Hermitage, que se tiene que ubicar en el puerto de Barcelona, en la zona del Hotel W, han anunciado que han encargado el proyecto al arquitecto japonés Toyo Ito, premio Pritzker 2013, uno de los arquitectos más influyentes de los últimos tiempos. Toyo Ito ya tiene varias construcciones en Barcelona, como las torres de la Feria de l'Hospitalet (Hotel Porta Fira y Torre Realia BCN) o el aparthotel Suites Avenue del Passeig de Gràcia. Los promotores del Hermitage le han querido otorgar el proyecto con el fin de mantener el vínculo de este artista con Catalunya.

Hospitalet de Llobregat Plaza de Europa, Torres de Toyo Ito (Torres Porta Fira), Hotel Puerta Feria y Torre Realía BCN zarateman wikipedia

Las Torres de la Fira. Foto: Zarateman.

El Puerto de Barcelona ha iniciado la tramitación del proyecto. Ya lo ha publicado en su boletín oficial y ha completado la ordenación interna del espacio portuario con el fin de acoger la infraestructura cultural al lado del mar. El edificio contará con una superficie de unos 16.000 metros cuadrados en cuatro niveles, presidido por un gran vestíbulo de altura total. Tendrá fachada a los cuatro vientos, con formas sinuosas.

Barcelona Aparthotel Suites Avenue Barcelona Luxe, obra de Toyo Ito en Paseo de Gràcia Zarateman wikipedia

Aparthotel Suites Avenue, en el Passeig de Gràcia, de Toyo Ito. Foto: Zarateman.

El proyecto se presenta como una subsede de la gran pinacoteca de San Petersburgo (que ya tiene instalaciones parecidas en Amsterdam, Kazán, Ferrara, Vladivostok, Víborg, Omsk y Vilna. Quiere unir arte y ciencia en un relato museológico que fue formalizado por el pensador Jorge Wagensberg (muerto en marzo). Se trata de un proyecto basado en la inversión privada, que se prevé que genere ingresos netos al Port. El proyecto fue apadrinado por Sixte Cambra, el antiguo presidente del Port de Barcelona y ahora lo ayuda a impulsar Mercè Conesa, su sucesora.

Este proyecto hace tiempo que se discute y acumula retrasos. Ahora, para que el proyecto continúe adelante, sería necesario que el Port aprobara el proyecto definitivo y formalizara la concesión. Después haría falta que el Ayuntamiento de Barcelona, que se ha mostrado reticente al proyecto, entregara la correspondiente licencia de obras. Colau ha afirmado que sólo dará su necesario apoyo a la iniciativa si está clara su viabilidad económica.