El Gremios de Floristas, Libreros y Panaderos de Catalunya han presentado hoy sus preparativos para Sant Jordi en la Fundación Catalunya La Pedrera. Se prevé que en este día se vendan 7.500.000 rosas, es decir, una por habitante. Los libreros esperan que, como de costumbre, el 23 de abril lidere el ranking de ventas anuales de libros. Y los panaderos, aunque no han hecho previsiones, están convencidos de que volverá a triunfar el pan de Sant Jordi. Joan Guillén, presidente del Consejo de Gremios, ha insistido en que su voluntad es la de obtener un reconocimiento internacional de la festividad de Sant Jordi mediante su conversión en Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
Foto: Twitter ,@ConsellGremis.
El Sant Jordi, estratégico
Muntsa Vilalta, directora general de Comercio de la Generalitat, ha querido resaltar el papel de los gremios en esta festividad: "Cada año el 23 de abril los ciudadanos y los visitantes podemos disfrutar de este día tan fantástico gracias al trabajo de los comerciantes". Vilalta ha recordado que los tres sectores implicados en la fiesta, el del pan, el de las flores y el del libro suman12.000 comercios, un 12% del total, con 35.000 trabajadores (un 10% del empleo total de los comercios del país). Y ha querido alabar la tarea de los tenderos que han sabido mantener esta tradición y al mismo tiempo renovarla continuamente. Agustí Colom, concejal de Comercio del Ayuntamiento de Barcelona, ha celebrado que Sant Jordi combine la fiesta con la reivindicación de la cultura y de la tradición.
La Guardia Urbana pide a los ciudadanos evitar acceder al centro en coche, bicicleta o patinete
Barcelona, zona cero
El centro de Barcelona, la zona cero de la fiesta, dispondrá de más espacio para puestos, lo que facilitará la logística de la fiesta, y también el paseo de los ciudadanos. Colom ha anunciado que habrá en total 4.000 puestos de rosas y 1.000 de libros legales, pero ha celebrado que cada vez se dispersen más por la ciudad, perdiendo peso Ciutat Vella en beneficio de otros barrios (sobre todo la Avenida Mistral y el paseo de Sant Joan, que ampliará la zona destinada a puestos). Benito Granados, intendente de la Guardia Urbana, ha resaltado que habrá un importante refuerzo de la seguridad en la zona centro. Para garantizar la circulación, ha pedido que la gente intente usar el transporte público para circular este día por el centro de la ciudad. Incluso ha solicitado que la gente se abstenga de ir con bicicletas o patinetes por el centro, ya que son vehículos molestos y peligrosos en zonas de grandes aglomeraciones. Ha anunciado que multiplicarán la presencia policial, uniformada y de paisano, para evitar los hurtos, con colaboración con los Mossos. Y también ha advertido que habrá acciones para combatir el intrusismo. La Guardia Urbana asegura que podría haber hasta 2.500 paradas ilegales. Para combatirlas Granados ha pedido, también, a los ciudadanos, que compren en los establecimientos autorizados, que estarán debidamente acreditados. También ha solicitado a los padres que vayan con niños que los identifiquen y que les anoten algún número de teléfono para poder contactar con facilidad con sus familiares en caso de pérdida (cada año se pierden diversos niños)
Se ruega a los ciudadanos que identifiquen a los niños, con el fin de facilitar su encuentro en caso de pérdida.
Los libros
Antoni Daura, comisionado del Gremio de Libreros de Catalunya, ha definido la fiesta como "un auténtico lujo, un activo que hay que preservar." Ha destacado que Sant Jordi está rompiendo fronteras, con la visita de libreros y periodistas extranjeros. Este año Daura ha querido destacar que los argentinos, "que son muy buenos lectores", se están pensando de celebrar el Sant Jordi "de forma permanente". Agustí Colom ha querido destacar también que hay que buscar nuevas estrategias, durante todo el año, con el fin de poner de manifiesto la tarea de los libreros. Y ha pedido a los ciudadanos que, por Sant Jordi, compren en los establecimientos comerciales porque "son los comercios los que salvan nuestros barrios".
Se prevé la venta de unas 600.000 rosas amarillas
El amarillo, de nuevo protagonista
Los floristas esperan unas ventas de los alrededores de 7.000.000 de rosas rojas, a las que se suma la previsión de la venta de 600.000 rosas amarillas, dedicadas a la reivindicación de la libertad de los presos políticos. Sospechan que podría haber un ligerísimo descenso con respecto a años anteriores, sobre todo por| el efecto de la coincidencia de fechas con la Semana Sana. Mercè Pasanau, vicepresidenta del Gremio de Floristas de Catalunya, quiere devolver a Sant Jordi su aspecto más emocional y ha definido el regalo de la rosa como "un gesto de amor, de amistad y de respeto". Por eso muchos floristas han querido sumarse a la campaña Ràdars para regalar rosas a las personas que viven solas, para que a nadie le falte una rosa por Sant Jordi. Joan Guillén, presidente del Consejo de Gremios, ha querido explicar cómo mantener en buen estado las rosas durante mucho tiempo: haría falta cambiar el agua a menudo y recortar el corte de las rosas en diagonal, tal y como lo hacen los floristas agremiados.
El pan, protagonista en los últimos años
Los panaderos ya se han involucrado a fondo en el Día del Libro y la Rosa. El Pan de Sant Jordi, que apareció hace 31 años en Barcelona, se ha extendido por todo el territorio (está patentado por el Gremio de Panaderos de Barcelona, que ofrece licencia gratuitamente a todos los panaderos de Catalunya, aunque reconoce que "hay intrusismo"). El pan con forma de bandera catalana compuesto por panes de nueces, queso y sobrasada ya se puede encontrar en muchos puntos. Y el Ayuntamiento de Barcelona ha ofrecido apoyo a esta iniciativa permitiendo que este pan se pueda vender, el 23 de abril, en puestos delante de las panaderías.