La Guardia Urbana espera que durante el Día del Libro, en horas puntas, se lleguen a acumular 1.500.000 personas en el centro de Barcelona. Es difícil hacer previsiones, por el hecho de que Sant Jordi cae en domingo, pero podría haber tanta aglomeración como un Sant Jordi laborable o quizás todavía más. Aunque hay muchos barceloneses que estarán fuera de la ciudad y celebrarán la fiesta en sus lugares de veraneo, también es probable que lleguen al centro de Barcelona catalanes de otras localidades, además de los muchos turistas que están en la ciudad en estas fechas. En la ciudad habrá 3.900 puestos de rosas y 923 de libros.

Expectación ante una parada|puesto de libros / Sergi Alcàzar

Esponjar el centro

El Ayuntamiento ha intentado evitar las acumulaciones mediante una estrategia de esponjamiento: se han diversificado los emplazamientos de los puestos de libros y rosas para evitar su acumulación excesiva y permitir el paso de la gente. Además de las tradicionales paradas de las Ramblas, se han dado licencias para instalar puestos en el Passeig Sant Joan, en la Diagonal, en la calle Còrsega, en el barrio de Gràcia y en otros puntos de la ciudad, en un intento de atraer a parte del público que tradicionalmente iba al centro urbano. Se prevé que las horas de mayor acumulación de gente, en el centro sean hacia el mediodía y hacia las seis de la tarde. A la Guardia Urbana le preocupa que la gente intente salir simultáneamente del centro urbano hacia las 20h, con el fin de ver el partido de fútbol Barça-Madrid. Eso podría colapsar el transporte público y las vías urbanas, y por eso se recomienda a la gente que salga de forma escalonada del centro de la ciudad, sin esperar la hora del partido.

El tiempo acompañará

Probablemente en Barcelona y en casi todo el territorio hará un magnífico día primaveral que invitará al paseo. Según las previsiones meteorológicas del Meteocat, en Barcelona se espera, por la mañana, cielo poco nublado, con tendencia a crecer las nubes por la tarde. El riesgo de precipitaciones, a pesar de todo, será muy bajo. Las temperaturas serán altas, con una mínima de unos 12º y una máxima de 21º. En cambio en la zona del Pirineo y el Prepirineo hay alguna posibilidad de precipitaciones por la tarde, pero dispersas y de poca intensidad.

Sant Jordi libros

Comercios abiertos

A pesar de ser domingo, el día de Sant Jordi hay autorización para abrir los establecimientos comerciales en Barcelona. Se prevé que, como mínimo en las zonas céntricas de la ciudad, haya mucha actividad comercial: es seguro que estarán abiertos los establecimientos de las grandes marcas y también todos los relacionados con alimentación, ocio... Se espera que sea un día muy favorable para el comercio.

Actividades complementarias

Con la idea también de esponjar el centro urbano, el Ayuntamiento y diferentes entidades han preparado fiestas y actividades culturales en los distritos y barrios. Una programación muy diversa, pensada para adultos y niños, que incluye concursos, ferias, talleres, espectáculos... Y, evidentemente, libros, rosas y dragones. Como es habitual, en la plaza Sant Jaume la Generalitat y el Ayuntamiento permiten visitas al público, y se esperan grandes colas. Varios museos organizan jornadas de puertas abiertas e incluso preparan actividades especiales.

Venta de libros y rosas

Las perspectivas en la venta de libros es buena. En los últimos años el número de libros vendidos por Sant Jordi ha ido recuperándose y ya se acerca al que había en los años anteriores al estallido de la crisis. El año pasado se vendieron 1,58 millones de libros, aunque a finales de día la lluvia estropeó la fiesta; este año se quiere superar aquella cifra. El Gremi de Llibreters no cree que el hecho de que Sant Jordi sea domingo afecte mucho a las ventas, aunque sospecha que puede distribuirse más la venta, ofreciendo más clientes a las librerías de fuera de Barcelona. No hay apuestas muy claras sobre cuál será el libro más vendido, pero los libreros saben que en realidad es una liga que juegan unos pocos títulos, porque tan sólo pueden ser los más vendidos aquellos libros que han sido distribuidos en grandes cantidades por todos los punto de venta, y estos no son muchos. Los floristas, en cambio, están más preocupados, ya que consideran que algunas empresas que hacían regalos de rosas de forma institucional no las harán (aunque algunas han adelantado los pedidos). Ahora bien, la principal preocupación de los floristas no radica tanto en la pérdida de ventas como en el intrusismo; probablemente menos de un tercio de los 6.000.000 de rosas que se cree que se venderán pasarán por floristerías agremiadas. El resto los venderán escuelas, ONG, entidades vecinales y simples ciudadanos que por un día se dedican a este negocio, en negro. El hecho de que la fiesta caiga en domingo podría favorecer la venta de pasteles de Sant Jordi y beneficiar a los pasteleros, en cambio no es tan claro el impacto que tendrá la fiesta sobre los panes de Sant Jordi, ya que hay panaderías que han intentado venderlos durante toda la semana. Algunas panaderías de Barcelona pondrán paradas en la calle para vender estos panes.

Una fiesta en proceso de exportación

Sant Jordi cada vez despierta más interés en el exterior. Mientras el Diplocat coordina los actos del Día del Libro y la Rosa que se organizan en diferentes partes del mundo, bajo el eslogan Books and Roses, también hay quien visita Catalunya para disfrutar de la fiesta y tomar ideas para exportarla. El Gremi de Llibreters y el Institut de Cultura de Barcelona mostrarán la fiesta a representantes de las 20 Ciudades de la Literatura de la Unesco. También está en Barcelona una delegación china, interesada en implantar esta fiesta en aquel país asiático. Y con un crucero ha llegado al puerto de Barcelona una delegación cultural sarda que también quiere disfrutar de la fiesta y difundir la fiesta del libro y la rosa por Cerdeña.