Durante las épocas de dominación romana (del siglo III a.C. al V d.C.) y visigótica (del siglo V al VIII), la Barcelona romana dispondría de un tipo de establecimiento que sería muy popular y que formaría parte indisociable de su paisaje social y urbanístico. Estos establecimientos serían las tabernas humildes, que eran conocidas con un nombre muy concreto y que servían un menú muy adaptado a las posibilidades económicas de su clientela.