El ex director del tabloide británico The Sun se ha llevado una buena paliza dialéctica este lunes por una columna donde critica agriamente que la tv Canal 4 enviara a cubrir el atentado de Niza a una periodista musulmana, que entró en directo en el telediario vestida con el hiyab, el pañuelo que cubre cabeza y hombros. Lo considera "una provocación".

La respuesta más dura le ha venido de la ex primera ministra conservadora de Exteriores (2012-2014), Sayeeda Warsi, primera ministra musulmana de la historia del Reino Unido, que ha acusado a Kelvin McKenzie "de atizar el odio racial" y "de intolerancia" en una carta al director actual del diario, Tony Gallagher.

La columna de McKenzie en The Sun

El exdirector acusa a Canal 4 de elegir a la periodista Fatima Manji "para meter el dedo en el ojo de los televidentes ordinarios, que ven el hiyab como un símbolo de la esclavitud de las mujeres musulmanas por una religión dominada por el machismo y claramente violenta". Pasa después a preguntarse si el canal "habría puesto a un periodista judío ortodoxo a cubrir el conflicto Israel-Palestina o un hindú a cubrir la masacre del Templo de Oro de Amritsar". Responde: "Claro que no".

Fatima Manji, graduada de la London School of Economics, hace cuatro años y medio que trabaja en Canal 4 y es una de sus caras más conocidas. Antes había trabajado cuatro años en la BBC.

McKenzie es un tótem de la prensa amarilla: dirigió The Sun entre 1981 y 1994, años en que el agresivo diario pasó a ser el más vendido del Reino Unido por delante del Daily Mirror, una época del que se recuerdan sus muy sonadas primeras. A mediodía de este lunes, la columna ya había generado más de 300 cartas de protesta en la entidad de defensa de los lectores Ipso. El diario la ha retirado de la portada de la web.

"Con los grandes ataques terroristas cometidos en el mundo por musulmanes, creo que el resto tenemos derecho razonable a estar preocupados por lo que realmente late en sus piadosos corazones. ¿Quién en el estudio representaba nuestros temores?", se pregunta McKenzie.

Sayeeda Warsi, de origen pakistaní, también fue presidenta del Partido Conservador entre 2010 y 2012 y ahora se sienta en la Cámara de los Lores con el título de baronesa. Responde a McKenzie sin esconder su indignación. "No sólo sería ilegal contratar a gente con ese criterio", dice, "sino que, si se aplica la regla de que nadie puede informar sobre sus correligionarios o sobre personas de su misma raza, la mayoría de los medios británicos no podría funcionar".

Más adelante, añade: "Los periodistas son también responsables cuando firman, haciendo coña, de las piezas donde perpetúan los estereotipos, demonizan y pretenden hacer responsable a toda una comunidad de las acciones de un solo individuo". Warsi califica esta actitud de "racismo respetable" y pregunta a Mckenzie si no sabe que el último año, en el Reino Unido, han aumentado un 300% las agresiones a mujeres musulmanas, "especialmente las que llevan hiyab",

"Me dirijo a usted, agrega Warsi, no porque como hombre blanco le haga responsable de todas las acciones estúpidas cometidas por otros hombres blancos, sino para instarle a ejercer su papel de periodista con responsabilidad". Warsi cierra su carta "ofreciendo amablemente" a Mckenzie si quiere seguir algún curso para desintoxicarse de su intolerancia, curso "impartido por alguno de los muchos expertos y profesores con que cuenta el Reino Unido" en ese campo.

Ni Mckenzie ni The Sun han comentado nada sobre el asunto.

Uno de los objetivos de fondo la columna del veterano periodista amarillo es minar la concesión de televisión a Canal 4, codiciada desde hace tiempo por una de las compañías de Rupert Murdoch, propietario del tabloide. "Coberturas como éstas ponen un interrogante sobre el futuro del Canal 4. Es una empresa con licencia [del gobierno para emitir]. Vendamos esta licencia a alguien que pueda ofrecer equilibrio en estos tiempos difíciles", concluye McKenzie.

No hace mucho, el 8 de octubre de 2014, The Sun publicó esta portada, de tono muy diferente a la columna de McKenzie:

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