Keith Flint, cantante de The Prodigy y de 49 años de edad, ha sido encontrado muerto este lunes en su domicilio en Londres, según ha informado la policía de Essex (Inglaterra). Las autoridades fueron alertadas esta mañana en torno a las 8:10 hora local y cuando llegaron a la vivienda del cantante, ubicada en la ciudad de Dunmow, encontraron a Flint muerto. Con todo, la policía ha indicado que el fallecimiento "no está siendo tratado como sospechoso".

Nacido en 1969, Flint formó a finales del años 80 el grupo de música electrónica The Prodigy, junto con el teclista Liam Howlett y el MC Maxim Reality. En el grupo, Flint tomó el papel de bailarín y posteriormente de vocalista y destacaba por su imagen, con una doble cresta y un septum -piercin nasal-, mucho antes de que este ornamento se popularizara. Flint acababa de regresar al Reino Unido de una gira por Australia y en mayo tenía previsto un tour por Estados Unidos.

La banda ha expresado en un comunicado su "profundo shock y tristeza" por el fallecimiento de Flint, al que calificó de "un pionero, innovador y leyenda". "Le echaremos siempre de menos", agregaron los otros dos integrantes de la formación, Howlett y Maxim.

Con The Prodigy firmó siete álbumes de estudio entre 1992 y 2018, discos con lo que se erigió en un nombre destacado de la música electrónica más transgresora y menos convencional, próxima a actitudes punkis y alejada de la complacencia comercial gracias a una atrevida fusión de techno, breakbeat y house. Su espíritu rompedor se trasladó también a sus videoclips, con imágenes de alto voltaje sexual como Baby's Got a Temper.

Entre sus canciones más conocidas figuren Breathe, Girls, Take me to the Hospital y The Day is my Enemy, además de la ya citada Baby’s got a temper.