El documentalista Fèlix Colomer, director de Vitals y Shootball es el autor de una de las series del momento, Las vidas de Fèlix, producida por Minoría Absoluta y rodada en catalán y castellano. Colomer recuerda y reconstruye en siete capítulos diferentes etapas de su vida y reflexiona sobre los aprendizajes de cada uno de los mundos de los cuales ha formado parte, como el arbitraje de fútbol, el ajedrez, la música trap o el porno. En la docuserie, Colomer se plantea si vale la pena que su hijo repita todas estas vidas que ha vivido. "La serie Las vidas de Fèlix es un regalo a mi hijo, Riu, para explicarle quién es su padre". Colomer explica que la idea inicial de la serie documental era hacer una propuesta "divertida sin dramas" y diferente de las cosas que había hecho hasta aquel momento que eran más documentales sociales "de llorera y pañuelo". Ahora quería hacer "una gran tontería, una gran payasada, que es como soy yo más en mi día a día". Sin embargo, al final hay momentos de todo a la serie, confiesa, con escenas muy dramáticas y emotivas pero con este tono de comedia.

Colomer recuerda y reconstruye en siete capítulos diferentes etapas de su vida y reflexiona sobre los aprendizajes de cada uno de los mundos de los cuales ha formado parte, como el arbitraje de fútbol, el ajedrez, la música trap o el porno

Las muchas vidas de un padre

Fèlix Colomer es el conductor de la serie y "la excusa" para conocer los mundos del ajedrez, del porno, del trap y del arbitraje, así como personas que forman parte. Colomer vivió estos mundos hace años y ahora vuelve haciendo, por ejemplo, en el capítulo del ajedrez, un seguimiento del mejor jugador de España de menos de 10 años en un torneo de Catalunya. "Al ver que lo gana todo y no es lo bastante feliz, me hace replantear cómo era mi infancia y por qué dejé el ajedrez". Todos los capítulos, explica, van más allá del tema aparentemente principal: "El porno trata sobre los complejos; el trap, sobre la búsqueda del éxito fácil; el ajedrez habla de saber ganar y perder y el arbitraje, sobre decir o no mentiras". Colomer cree que todas estas aficiones, de las cuales ha formado parte, tienen en común que las ha acabado dejando, pero la única que sigue desde los 10 años es el mundo audiovisual, del cine y del documental.

La idea inicial no era que fuera tan personal, sino seguir a 'friquis' en situaciones surrealistas, pero al final he implicado a la familia y los amigos

Confiesa que la serie se ha convertido para él en "una forma de terapia y de volver a puntos que no tenía cerrados" de su vida y a heridas que todavía tenía abiertas. Asegura que no se imaginaba que la serie sirviera para todo eso. "La idea inicial no era que fuera tan personal, sino seguir a 'friquis' en situaciones surrealistas, pero al final he implicado a la familia y los amigos". Así, en Las vidas de Fèlix se combinan los recuerdos y la memoria de su creador, que quedan plasmados en imágenes de archivo de su infancia y juventud, con los encuentros con personas actuales que forman parte de estos mundos del arbitraje o del ajedrez. Y todo, con el objetivo de erigirse en una carta dedicada a su hijo: "Tengo claro que Riu es lo más importante de mi vida y la serie funciona como un regalo a él para explicarle quién es su padre y plantearme si me gustaría que él repitiera estas vidas".

Es un honor para mí que las dos únicas series en catalán de HBO son mías

Estrenada en el festival Serielizados Fest de Barcelona, Las vidas de Fèlix está rodada en catalán y castellano, y este viernes se estrena dentro de la oferta de contenidos en catalán de HBO Max, que ya cuenta con una colección titulada 'En Catalán'. "Es un honor para mí que las dos únicas series en catalán de HBO son mías", destaca. Las vidas de Fèlix es la segunda producción en la cual participa Colomer que se estrena en HBO Max. El director catalán dirigió el año 2021 la serie documental Vitals. Una història humana, donde relata los momentos intensos que se vivieron en el Hospital Parc Taulí de Sabadell a través del seguimiento a enfermos de coronavirus y de sanitarios durante varias semanas de marzo a junio del 2020.