El sexto capítulo de la nueva temporada de la serie Juego de Tronos ha aportado una novedad en las imágenes rodadas en Girona. Desde ahora, la ciudad tiene mar, al menos en la ficción, tal como se puede ver en una de las imágenes, donde a pie de las escaleras de la catedral se abre una inmensa plaza que lleva directamente al puerto.

Esta imagen se ha podido ver en un capítulo en que la ciudad de Girona gana en presencia, en especial en las escalinatas de la catedral, pero también en otras localizaciones.

La escena ha disparado los comentarios en las redes sociales, conscientes de que la ciudad sale totalmente transformada tras esta aportación televisiva.