El director de El País, Antonio Caño, ha enviado una carta a los suscriptores del diario que se dieron de baja en disconformidad con la cobertura de la crisis del PSOE, especialmente por el editorial del pasado 29 de septiembre "Salvar al PSOE". Caño no descarta que su diario “haya sido presa [...] de la misma efervescencia” que caracteriza estos “tiempos de gran turbulencia política” según la citada carta, que dio a conocer InfoLibre.

El director del diario se disculpa ante los ex subscriptores y admite que “en la pasión de nuestro oficio, el tono empleado […] ha podido a veces no ser el más adecuado”. Caño se justifica en la situación del entorno, en el que “los ánimos están exaltados” y “la incompetencia e irresponsabilidad de unos y de otros ha creado un clima de irritación y desánimo en una gran parte de la sociedad”. “Si ha sido así, lo lamento profundamente”, concluye.

Caño asegura en su carta que “toma nota de la queja” y promete hacer lo que esté en su “mano para corregir errores” para no decepcionar de nuevo a los lectores.

Infolibre explica que, según algunas informaciones, la posición del diario, abiertamente contraria al entonces secretario general del PSOE, provocó en torno a 500 bajas en aquellos días, aunque fuentes del periódico niegan esta cifra.

La pieza que mayor irritación ha provocado entre los lectores es el editorial "Salvar al PSOE", que retrata a Pedro Sánchez como "un insensato sin escrúpulos que no duda en destruir el partido que con tanto desacierto ha dirigido antes que reconocer su enorme fracaso". El diario más leído de España describe al líder socialista como un político cobarde, arrogante, sectario, mentiroso, ambicioso y obtuso.

El editorial propone el nombramiento de una gestora y la celebración de un congreso extraordinario tras aclarar la formación de Gobierno. Ese es precisamente el rumbo que ha tomado el PSOE tras la dimisión de Sánchez.

El País ha publicado 34 editoriales sobre la formación de gobierno en España entre el 27 de junio, día después de las últimas elecciones, y el día del citado editorial. Uno cada tres días. El mensaje en todos ellos es la necesidad urgente y absoluta de formar gobierno, sí o sí, y el rechazo a unas terceras elecciones. En cuanto a la información del diario, midió con ese criterio toda la actividad política de esos días. Esta actitud, ha ocasionado quejas públicas muy diversas en días posteriores a la publicación del editorial:

El Comité de Redacción del periódico, órgano que representa a sus periodistas, pidió explicaciones a Antonio Caño, que se reunió con ellos apenas un minuto para decirles que rechazaba cualquier debate sobre la línea editorial, de la que él es el único responsable.

La Defensora del Lector de El País recibió más de cien quejas en su buzón de correo electrónico en los tres días siguientes al editorial. En una, Álex Dorado Nájera, señala: "Pueden llevar una línea editorial diferente a la que me gustaría, pero lo que no pueden es insultar a una persona que representa lo que opinamos muchos votantes, porque nos está insultando a todos". Cuando quiso tratar el asunto con los jefes de la redacción, sin embargo, le fue peor que al Comité. No pudo obtener respuesta del director.