Puede que os suene la expresión catalana via fora!, a veces usada como grito de ánimo para hacer algo. ¿De dónde viene? El nombre femenino via significa 'recorrido por donde se pasa para ir a un sitio' (La via més directa per a anar de Lleida a França és passar per la vall d'Aran 'la vía más directa para ir de Lleida a Francia es pasar por el valle de Aran'; o bien: Totes les vies d'entrada i sortida a Barcelona estaven tallades per la policia, que buscava desesperadament el president Puigdemont 'todas las vías de entrada y salida a Barcelona estaban cortadas por la policía, que buscaba desesperadamente al presidente Puigdemont'). También tenemos nombres de calles como via Augusta (Tarragona) o via Laietana (Barcelona). Como sabéis, este término se aplica sobre todo al lugar por donde pasa un tren (La via ha quedat tallada a causa d'un esllavissament 'la vía ha quedado cortada a causa de un derrum', donde via se refiere a la vía férrea) y también aparece en contextos más específicos (como via ferrada, un sistema creado para trepar en un espacio natural).

A partir de ese significado, la gente podía darle un valor más abstracto; por ejemplo: Algunes situacions es consoliden per la via dels fet 'algunas situaciones se consolidan por la vía de los hechos'. O también: El vaixell tenia una via d'aigua 'el bajel tenía una vía de agua'. La abstracción alcanzó niveles máximos y ello permitió crear la preposición via 'pasando por' (y que también puede decirse directamente per): Anirem a Àustria via (o per, o a través de) Suïssa 'iremos a Austria pasando por Suiza'.

En este proceso de dar valor abstracto al nombre via, acabó relacionándose con el hecho de apresurar a alguien; por eso existe la expresión fer via (en la Cataluña central y oriental dicen más bien fer-ne via; también se dice fer a via). Estas expresiones indican que alguien va rápido realizando una tarea, y, precisamente por eso, en forma imperativa permite indicar a alguien que se apresure (en este último contexto, en el sur de Catalunya puede oírse avio!). Ejemplos: Aquells veremadors feien molta via collint el raïm 'aquellos vendimiadores se apresuraban recolectando las uvas'; o: Si no fem via, se'ns farà de nit 'si no vamos más a prisa, se nos hará de noche'; o: Hem de fer via amb amb les caixes: carreguem-les ràpid 'debemos ir rápido con las cajas: ¡carguémoslas pronto'. He aquí dos ejemplos imperativos: Venga, feu a via i no us entretingueu! '¡ea!, a prisa y no os entretengáis'; o: Heu de recollir les eines que hi han escampades a l'era, i feu-ne via, que venen nuvolades 'deben ustesdes recoger las herramientas que hay esparcidas por la era, y a prisa, que se acerca un chubasco'.

También se usa como interyección

Y, al final, via se usó también como si fuera una interyección, para exhortar a alguien a moverse, a avanzar. Por ejemplo, unos niños deben subir en un coche y dicen a su padre: Papa, podem portar les joguines al cotxe? 'papá, ¿podemos llevar los juguetes al coche?'. El padre puede responder: Sí, però no us entretingueu... va, via!, 'sí, pero sin demorarse, id de prisa'.

En este contexto, en la lengua antigua solía añadirse, pospuesta, una palabra posicional para indicar hacia dónde debía hacerse el movimiento, como dins 'dentro', fora 'fuera' o sus 'arriba'. Tales expresiones (via dins!, via sus!) eran habituales en época medieval, pero fueron perdiéndose, salvo via fora!, que ha llegado a usarse en el siglo XX, a veces incluso como nombre sinónimo de alerta o alarma (Va sonar el viafora). Por cierto: hay gente que, en el siglo XX, también decía dia fora. Así que ya lo sabéis: cuando se deba tirar adelante algo... ¡todos via amunt!