El Gremi de Llibreters ha hecho un llamamiento a la ciudadanía de Catalunya para que el día de Sant Jordi, a las doce del mediodía y a las seis de la tarde, salga a ventanas, terrados, patios o balcones y lea en voz alta, para acabar después con un aplauso con el grito del nombre de su librería.

Se trata de una propuesta para seguir señalando el 23 de abril como el día del libro, aunque la pandemia del coronavirus no permitirá celebrarlo y después de que el sector haya acordado con el Departamento de Cultura trasladar la fiesta al 23 de julio.

El Gremi de Llibreters propone también difundir la acción alternativa a través de las redes sociales con las etiquetas #Senseparadesperosenseparar y #llibresalaire.