Es posible que reconozcáis a Clàudia Costas (Barcelona, 1989) por haber interpretado el papel de Ona en la serie 'La Riera' de TV3, pero ahora ya hace un tiempo que ha dejado la carrera de actriz aparcada y trabaja detrás de cámaras, donde dice que se siente más cómoda. Actualmente, ejerce de coach de actores en la serie 'Com si fos ahir' acompañando a los niños que salen. Les ayuda a prepararse el personaje, les hace de guía y les ofrece apoyo en todo momento. Y lo compagina con la escritura. Acaba de publicar 'El primer cop de moltes coses' (La Campana), una novela de ficción que nos invita a enfrentarnos a los propios miedos y a salir de la zona de confort. Que la protagonista de la historia sea homosexual no es casualidad, Costas ha decidido que en todos sus libros (tiene cuatro más en el cajón) las personas del colectivo lgtbiq+ estén presentes, tal como pasa en la vida real; una forma de darle visibilidad y promover la normalización en el arte. Quedamos en el patio interior de la Casa Usher, una librería muy acogedora situada en Sant Gervasi, para conversar sobre el libro, su carrera y el futuro que le espera.

¿Qué te inspiró a escribir 'El primer cop de moltes coses'?
La verdad es que hay muchos temas en esta novela de los que quería hablar, como la dificultad que tienen algunas personas de relacionarse con los otros, y la soledad en la gente joven, porque a veces lo asociamos a gente mayor.

Háblame un poco de la trama
Maya es una chica de 29 años que vive sola, tiene unas rutinas establecidas, poco a poco se ha construido una gran muralla donde está protegida y donde no se siente vulnerable, y poco a poco se ve forzada a interactuar con gente de su alrededor, y eso la irá cambiando y le irá mostrando aspectos nuevos de ella misma y de los demás.

Maya es un personaje bastante peculiar.
Tiene manías, es muy obsesiva, fregando lo antisocial, tiene una obsesión con cumplir las rutinas, con tener la vida organizada y las cosas bajo control. Además, un día, viendo la película Spiderman, adquiere unos superpoderes que la obligan a transformarse, a interactuar con el mundo. Y Este es un esfuerzo que tiene que hacer para salir un poco de lo que está acostumbrada.

Claudia Costas, actriz y escritora / Fotógrafo: Miquel Muñoz
Clàudia Costas, actriz y escritora en la librería Casa Usher de Barcelona / Fotógrafo: Miquel Muñoz

Y además atraviesa la crisis de los treinta.
Los treinta son una edad muy complicada de entrar, sobre todo para las chicas. Bien, al menos por| mi experiencia y las personas de mi alrededor. Son como un cataclismo. Al final es un crecimiento, es un momento de transformación y de aprendizaje. Y, además, descubre que está enamorada de su vecina, y este es una de las primeras veces de muchas cosas.

¿Sigue siendo un tabú la homosexualidad?
Me encantaría decir que la homosexualidad no es un tabú. Me encantaría. Pero creo que todavía estamos muy lejos de que no lo sea. Por eso, he querido hablar de esto. Me encantaría que esta pregunta no tuviera que salir en una entrevista. Y me gusta siempre tocar el tema en todos los libros que escribo, porque hasta que no dejen de preguntarme por esto, es que todavía estamos muy lejos (de la normalización.)

Me encantaría decir que la homosexualidad no es un tabú

¿Por lo tanto, crees que es importante que haya referentes en la literatura para dar visibilidad lésbica o, en general, al colectivo LGTBIQ+?
Sí, como los hay en la realidad, los tiene que haber en al arte. Lo he hecho expresamente de poner personajes homosexuales siempre a todas las novelas, a todas las ficciones que he escrito. Sí que es verdad que quizás todavía lo tenemos que acompañar un poco. Y es una lástima, pero en mi caso sí, siempre incido en este tema.

Y también denuncias la homofobia, porque aparece un personaje gay que es apaleado.
En este caso es la única referencia de un hecho real que ocurrió de verdad. Cuando lo escribía, apalearon a una persona homosexual cerca de esta librería. La noticia me dejó muy colapsada. Todavía me sorprende que pasen estas cosas. Es lamentable. Sí, quería tocar este tema.

Clàudia Costas / Fotógrafo Miquel Muñoz
Clàudia Costas / Fotógrafo: Miquel Muñoz

¿Consideras importando escribir con perspectiva de género?
Creo que es importante escribir de las cosas que pasan en la vida y de las realidades que hay ahora mismo. Actualmente, estamos viviendo un gran movimiento que es el feminismo porque estamos lejos de conseguir el equilibrio.

Actualmente, estamos viviendo un gran movimiento que es el feminismo porque estamos lejos de conseguir el equilibrio

¿La novela está inspirada en alguna historia personal?
No, no. No he cogido ningún superpoder. (se ríe). Siempre hay muchísimas cosas personales que entran en juego, pero no hay ningún desencadenante en este caso que sea algo muy personal.

¿Qué primeras cosas has hecho este 2023 que te hayan cambiado la vida?
El año pasado hice el Camino de Santiago entero y fue una de estas cosas, igual que Maya, que tiene este momento de transición a los 30, para mí fue como un antes y un después, hacer lo camino. Los viajes en general lo son. Creo que los momentos de ruptura de cosas son los momentos de cambio, es decir, cuando te separas, cuando vas a vivir en otro lugar.

Clàudia Costas / Fotógrafo Miquel Muñoz
Clàudia Costas / Fotógrafo: Miquel Muñoz

Y supongo que publicar una novela
Perdón, me he dejado la más importante. Es que todavía no soy muy consciente.

¿En qué momento decides enviar el texto a la editorial? ¿O dicho de otra manera, qué te empuja a hacerlo?
Después del camino, cuando volví, entré en la web de Penguin Random House y vi que tenían un sitio para enviar los manuscritos. Y al cabo de poco recibí una llamada.

Tú eres actriz, pero ahora estás trabajando de coach de actores y en concreto con niños a la serie 'Com si fos ahir' de TV3.
Sí, he sido actriz muchos años, pero quise cambiar de lado de la cámara. Encontré una profesión perfecta que era la de coach de actores. Es una profesión muy bonita porque al final acompañas a los actores, los ayudas con todo lo que pueden necesitar o que les puede ir bien. Y no estás delante de la cámara, cosa que me encanta. Lo disfruto muchísimo.


¿Cómo es el día a día de tu trabajo?
Llego al plató a la hora que los convocan, a veces muy temprano, que todavía están muy dormidos, y mi trabajo -a parte de despertarlos-, es hacerles hacer ejercicios para que cojan energía y porque la voz la tienen muy dormida. Entonces los acompaño al camerino, se cambian, vamos a maquillaje, aunque no los maquillan porque son niños (a los adolescentes sí porque ya les sale algún granito). Vamos al camerino y los ayudo a preparar las secuencias del día. Cuando entramos en plató, ya está todo el equipo, dirección y los otros actores. Ellos ya van con la escena súper preparada y están seguros y cómodos. Si han tenido alguna duda, ya lo hemos hablado. Los he puesto al día. ¿De dónde viene aquella escena? ¿Por qué estamos como estamos? Si la escena es complicada o tiene una transición emocional lo practicamos antes, y así el director solo les da cuatro indicaciones. Básicamente, acompañarlos, que estén tranquilos y se lo pasen bien, que para mí, sobre todo con niños, es lo más importante.

Tú no tuviste esta figura.
No, pero me habría encantado. Yo también empecé muy pequeña y ahora que la conozco es una de las razones por las cuales quiero hacer este trabajo. Es muy necesaria, sobretodo cuando son pequeños. Porque es una profesión muy complicada, hay mucho estrés alrededor, presión y cuando eres pequeña no lo sabes gestionar. Hay que tener una personalidad muy bien formada para gestionar todo lo que comporta.

Es una profesión muy complicada, hay mucho estrés alrededor, presión y cuando eres pequeña no lo sabes gestionar. Hay que tener una personalidad muy bien formada para gestionar todo lo que comporta

Clàudia Costas / Fotógrafo Miquel Muñoz
Clàudia Costas durante la grabación de la entrevista / Fotógrafo: Miquel Muñoz

¿Con qué edad empezaste a actuar?
Empecé con 7 años a estudiar, pero profesionalmente hice alguna cosita a los 12, y a los 15 ya estaba en el teatro, compaginándolo con el instituto. Por las tardes siempre ensayos y los fines de semana bolos.

¿Y ahora te sientes más cómodo detrás de la cámara?
Sí, la verdad es que me gusta más. De momento creo que va por etapas. Yo soy una persona que me gusta mucho experimentar. Me gusta mucho aprender cosas nuevas, ahora me apetece mucho más escribir y hacer de coach. Hay proyectos muy bonitos, eh. quien sabe, no lo descarto en un futuro.

Me apetece mucho más escribir y hacer de coach. Hay proyectos muy bonitos, quien sabe, no lo descarto en un futuro

¿Y dónde te proyectas dentro de unos años?
Detrás de un ordenador escribiendo. Sé que es muuuuuuy complicado vivir de eso. Pero por qué no hacer la carta a los Reyes.

Esta es la primera novela que publicas, pero tienes más en el cajón.
Sí, tengo cuatro novelas acabadas y algunas a medias, dos en catalán y dos en castellano.

Clàudia Costas /Fotógrafo Miquel Muñoz
Clàudia Costas con su novela 'El primer cop de moltes coses' / Fotógrafo: Miquel Muñoz


¿Te has sentido más cómoda escribiendo en catalán o en castellano?
Hay historias que me vienen en catalán, y hay otras que me vienen en castellano. En mi casa siempre me han hablado en catalán y yo he leído mucho desde pequeña en castellano.

¿Eres una buena lectora?
¿Qué se entiende por buena lectora? Leo mucho. Intento leer mínimo, mínimo, mínimo, un libro por semana, y un poco de todo, pero sí que es verdad que siempre vas hacia géneros parecidos. No leo terror, por ejemplo.

¿Cuáles son tus referentes literarios?
Eso es muy difícil, porque no tengo referentes en nada. Tengo muy mala memoria. He tenido etapas de leer todos los libros que iban sobre librerías, por ejemplo.

¿Más hombres o mujeres?
Ostras, no lo había pensado. Muchas mujeres últimamente. Estoy leyendo mucha literatura de aquí.

Clàudia Costas / Fotógrafo Miquel Muñoz
Clàudia Costas en el patio de la Casa Usher / Fotógrafo Miquel Muñoz

¿Tienes alguna anécdota relacionada con la escritura del libro?
Una de las primeras personas que lo leyó es mi mejor amiga y me dijo que me parezco mucho a la protagonista, y esto que yo había dejado a Maya de vuelta y media. Mucha gente me está diciendo que tengo la misma voz que ella.

¿Cómo te tengo que imaginar escribiendo?
No me pongo nunca horarios. Justamente ahora he ido a vivir fuera para encontrar esta tranquilidad y no oír coches. Y tengo un rincón muy bonito, muy soleado. Escribo los días que hace buen día. Lo hago sola, y con una infusión delante del ordenador.

Me gustaría que me hablaras de la portada.
Tuvimos muchas aventuras con esta portada. De hecho, es una referencia que sale en el libro. Es un cuadro que le regalan a Maya, y que es ella misma dando una patada al aire y de esta salen flores, colores y muchas luces. La idea de alguien chutando flores nos gustaba mucho.


¿Cuál ha sido el mayor desafío que te has encontrado mientras escribías el libro?
Lo que me cuesta más es acabarlos. Los principios los escribo bastante deprisa, salen muy fluidos, y hacia el final hago muchas probaturas.

O sea que cuando empiezas a escribir no tienes demasiado claro el final.
Exacto, y eso que he estudiado en el Ateneo de Barcelona y me han enseñado toda la estructura, todos los diagramas, todos. Pero voy a la mía, lo hago por instinto.

¿Crees que los libros que tienes en el cajón saldrán pronto?
Ojalá, espero que sí. Tengo historias que me gustaría mucho compartir.

Clàudia Costas /Fotógrafo Miquel Muñoz
Clàudia Costas / Fotógrafo: Miquel Muñoz

¿Cuál crees que es el perfil de lector que disfrutará con tu libro?
Eso es muy curioso, porque cuando lo envié dudaba de si era un libro juvenil, y me dijeron que no. El target es bastante femenino. Mucha gente de la edad de mi madre, dijéramos unos 60 y pico lo está disfrutando mucho y me está sorprendiendo, porque también lo están leyendo mis niños a quienes hago coach, -que hay muchos que no leen de forma habitual-, y les está gustando. ¡Y tienen once años!

¿Está siendo positivo el feedback?
¡Sí, y llevamos muy poquito, estoy super agradecida porque está siendo buenísimo! La gente me envía mensajes diciendo que se lo ha pasado muy bien, que es fresco, ágil, y rápido de leer; y a mucha gente que no lee se lo está leyendo. Eso me hace mucha ilusión.

Ahora, cuando te oía me preguntaba si has hecho doblaje.
Sí, doblé a la Ginny Weasley, en las últimas pelis de Harry Potter.

Clàudia Costas nos lee un fragmento de su primera novela publicada, 'El primer cop de moltes coses'