El grupo de comentaristas políticos "Autobús de campanya" se ha pasado del tweet al formato libro en El llibre d'Autobús de Campanya. Se trata de un colectivo que apareció a partir de la campaña electoral de 2012, y que se ha hecho extremadamente popular a través de su cuenta de Twitter @encampanya. Presumen de saberlo todo de la política catalana, y si eso no es verdad, se parece bastante a la realidad. Dicen que los miembros del grupo trabajan en diferentes medios de comunicación, y que esconden su identidad para evitar interferencias de sus jefes (aunque Carles Bellsolà es su cabeza visible). En Twitter publican aquello que no pueden sacar en sus radios o en sus diarios.

Ningún político se salva

El subtítulo del libro es muy claro: "El twitter que (no) hace reír a los políticos". @encampanya pretende dar risa, y su humor es sangrante. Mucho más allá del Polònia y las bromitas blandas que acostumbran a aparecer en los medios locales. El humor del Autobús, desdichadamente, no es muy habitual aquí. Por ejemplo, ayer publicaba dos fotografías de Felipe González, en épocas bien diferentes, con el lema "Felipe González, de la chaqueta de pana a Panamá". Pero no sólo reciben los socialistas: también guarda dedicatorias ácidas para la ANC: "Si no vas a la manifestación, conga, lambada, rave, orgía o lo que se organice el 11 de septiembre, quizás visto como un colaboracionista. Y un idiota sin alma, en términos generales". Convergència se lleva a algunas de las críticas más contundentes, como la acusación de haberse pasado del "puta-i-ramonetisme al soberanismo". La CUP se ridiculizada por sus mecánicos asamblearias y por su "faismo", y sus dirigentes por su afición a las camisetas reivindicativas... Y el PP es satirizado por absolutamente todo, al mismo nivel, aproximadamente, que Unió.

Otros ilustres viviseccionados

La crítica no se limita a los políticos: hay también comentarios muy rotundos hacia los medios de comunicación. Los autores del libro, que sin duda los conocen bien, ironizan sobre su parcialidad y su dependencia de los poderes fácticos. Y el Autobús en Campaña también reserva su artillería para las grandes empresas, como La Caixa, o para la monarquía.

Del 25N de 2012 al mandato de Puigdemont

Este libro se organiza de forma cronológica. Pretende analizar la política catalana desde el 2012 hasta la actualidad. Y se organiza en base a grandes sucesos: el caso Millet, la sentencia del Constitucional, el Concert de la Llibertat, el ascenso de Podemos, la retirada de Duran, el caso Pujol... Y a través de estos acontecimientos, los autores demuestran una clara voluntad de destapar los tejemanejes de la política catalana.

Humor fallido

A pesar de que los análisis del Autobús de Campaña son muy agudos, su humor no siempre es idóneo en formato libro. Reservan 13 páginas a canciones políticas satíricas, con la música de conocidas canciones catalanas, como L'estaca. Es un recurso que puede servir en un programa radiofónico, más espontáneo, pero que chirría en un libro. La adaptación de cuentos populares a personalidades políticas también acaba siendo un tanto infantil. Pero aquello menos logrado es la construcción de diálogos imaginarios entre personajes: una técnica que puede resultar muy adecuada en un guiñol, pero que aquí se ve falta de solidez. Por otra parte, hay una cierta descoordinación entre las diferentes partes del libro, un problema quizás derivado de la naturaleza colectiva de la obra. En definitiva: el excelente humor de l'@encampanya en los tweets no se consigue mantener con el formato libro. Esperamos reír cuando vuelvan al formato de 140 caracteres.