El dibujante Lluís Juste de Nin presenta estos días una novela gráfica, Andreu Nin, seguint les teves passes (Edicions del Ponent). La obra constituye una defensa del legado del revolucionario catalán, pariente lejano del dibujante. La novela es fruto de una larga investigación: el dibujante no sólo ha consultado la bibliografía disponible sobre Nin y ha recurrido a los especialistas, sino que también ha recogido testimonios sobre su vida entre diferentes parientes del biografiado. Y ha puesto al descubierto una historia fascinante: "Si de aquí no sale una película me enfadaré", dice en broma.

El legado de Nin

"El legado que dejó a Andreu Nin es de una vigencia impresionante", asegura Juste de Nin. "Andreu Nin decía que la justicia social es inseparable de la liberación nacional". El dibujante añade que, por desgracia, todavía hay una izquierda catalana, supeditada a la española, que no admite que para haber liberación se tiene que respetar la voluntad del pueblo. Y recuerda que todas las sensibilidades de la izquierda catalana se pueden sentir reflejadas en el pensamiento de Nin. "Yo no soy comunista, pero respeto mucho las ideas de Nin, porque él pensaba en 1936 y ahora estamos en 2016". Pero argumenta que el revolucionario tenía mucha razón en una cosa: "Dictadura, ni la del proletariado".

Andreu Nin decía que la justicia social es inseparable de la liberación nacional

Juste de Nin, en su novela gráfica, hace un itinerario detallado por la vida del revolucionario catalán, aunque evita el orden cronológico

Una vida en tiempos agitados

Andreu Nin (1892) dejó su El Vendrell natal para estudiar magisterio. En sus tiempos de estudiante entró en contacto con los republicanos nacionalistas y con la CNT, ya que a pesar de no ser anarquista, estaba convencido del potencial movilizador del sindicalismo. Sobrevivió a un atentado contra él de pistoleros a sueldo de la patronal, en un bar de la plaza Bonsuccés de Barcelona. Nin se marchó en 1921 a Moscú como delegado de la CNT, en vista a la integración de este sindicato en la Internacional Sindical Roja. Allí se enamoró de una belleza rusa, Olga Tareeva Paulova, que había sido bailarina en el Bolshoi. Se casó y tuvieron tres hijas trigéminas, de las cuales una murió al nacer (más tarde se murió otra de las trillizas y tuvieron otra hija). Nin ingresó en el PCUS, pero muy pronto empezó a criticar el autoritarismo de las autoridades soviéticas. En Moscú recibió una delegación presidida por Francesc Macià, que intentaba obtener apoyo militar para iniciar acciones armadas contra la dictadura de Primo de Rivera. Aunque intentó ayudar a Macià no tuvieron suerte. Más tarde Nin viajó por Europa, con documentación falsa, en un intento de encuadrar internacionalmente a los sindicatos. En Francia fue encarcelado durante meses.

Por la revolución contra Stalin

Después de la muerte de Lenin, Nin tomó partido claramente por Trotsky y contra Stalin. Abogaba por la "revolución permanente" y criticaba los privilegios de la jerarquía del PCUS. "Stalin no era comunista, sólo era estalinista", según Lluís Juste de Nin. Andreu Nin fue apartado del PCUS y para sobrevivir se vio obligado a hacer de traductor. Trotsky, el protector de Nin, fue expulsado del país. Nin intensificó sus relaciones con Joaquim Maurín, un comunista catalán disconforme con el estalinismo. En este tiempo, marginado de la política, para ganarse la vida en Moscú, tradujo al catalán Crim i càstig de Fiodor Dostoievski. Finalmente en agosto de 1930 fue expulsado de la URSS. Gracias a la caída de la dictadura de Primo de Rivera, pudo volver a Catalunya.

La revolución catalana

En Catalunya se dedicó a traducir los clásicos rusos al catalán. Pero no abandonó la política. Nin dio apoyo a la proclamación del Estat Català por parte de Macià el 14 de abril de 1931. Juste de Nin destaca que Andreu Nin lo consideraba "el acto más revolucionario producido por aquellas fechas". En septiembre de 1935 Nin y Maurín decidieron crear el Partido Obrero de Unificación Marxista (POUM), revolucionario y anticentralista. Eso supuso la ruptura de Nin con Trotsky, quien defendía que los revolucionarios tenían que entrar en el PSOE y hacerlo cambiar el rumbo. Al estallar la Guerra Civil, el POUM enseguida organizó sus propias milicias y Nin se incorporó a la conselleria de Justícia de la Generalitat, en una muestra del apoyo de su partido a la República. Pero los agentes estalinistas intentaron boicotear al POUM, al que acusaban de traidores. Nin fue sacado de la conselleria y en una remodelación del gobierno el POUM fue excluido de éste.

La muerte del héroe

En mayo de 1937, en plena Guerra Civil, los anarquistas y los militantes del POUM se enfrentaron a los comunistas y a las fuerzas leales al gobierno español y a la Generalitat. Los anarquistas y los poumistas fueron derrotados. Y poco a poco se fue poniendo en marcha la campaña contra los líderes del POUM, diseñada por la NKVD, la policía secreta rusa (el antecedente del temido KGB). Juste de Nin, que había militado en el PSUC, destaca que en esta campaña participó gente que él había admirado mucho, como Santiago Carrillo o La Pasionaria. El 7 de junio Nin fue detenido en una operación ilegal, llevada a cabo por agentes soviéticos y miembros de las fuerzas de seguridad españolas. Fue conducido a Madrid y de allí a Alcalá de Henares. Se le torturó para que firmara una falsa confesión de complicidad con los fascistas. A pesar de las torturas se negó. Finalmente el 20 de julio lo sacaron del chalet donde lo tenían encerrado. Lo condujeron a Perales de Tajuña, lo ejecutaron y enterraron su cadáver en la cuneta del camino. Nunca se ha encontrado su cuerpo.

¿Dónde está Nin?

Los militantes del POUM llenaron las calles de Barcelona con pintadas pidiendo por elparadero de su líder. Los estalinistas respondían con pintadas debajo de las del POUM: ¿"ÓN ÉS EN NIN? A BURGOS O A BERLÍN". Andreu Nin fue acusado repetidamente de traición. Se decía que se había fugado de la zona republicana y se había pasado al enemigo, e incluso se argumentaba que el POUM siempre había estado al servicio del fascismo. Más tarde, debilitado por la represión, los otros líderes del POUM fueron juzgados y condenados. Por aquellas fechas, Orlov, el espía de Stalin responsable del asesinato de Nin, se escapaba a los Estados Unidos, temeroso de que la represión soviética acabara por pillarlo (no se equivocaba, muchos de sus compañeros fueron ejecutados).

Donde|Dónde se Niño

La vida familiar

Lluís Juste de Nin es pariente lejano de Nin. Y se ha interesado especialmente en seguir la vida familiar de Nin. Ha conseguido localizar a sus nietas. Y a través de éstas, y de documentos diversos, ha conseguido ir averiguando la historia de la viuda de Nin y de sus hijas, las otras víctimas: se vieron obligadas a huir de Catalunya y a vivir escondidas durante mucho tiempo (incluso revela que las viudas de Nin y de Trotsky se encontraron en una ocasión a Coyoacán, en México).

El injusto olvido

La implicación de destacados personajes de la izquierda española en la desaparición y asesinato de Nin supuso su proscripción durante décadas. Juste de Nin considera que en estos tiempos en que se valora tanto la memoria histórica, y que la izquierda reclama gestos a la Iglesia y al Estado, las fuerzas de izquierda no han hecho lo suficiente para reconocer sus errores y para recuperar la figura de Nin, y recuerda que hasta 2013 las cenizas de su esposa, Olga Taeereva, no pudieron ser depositadas en El Vendrell, como ella quería. Y al final de la novela gráfica se hace constar que hasta 2013, 36 años después de las primeras elecciones democráticas, el Parlament no hizo un homenaje al luchador de El Vendrell.

El dibujo como misión

Lluís Juste de Nin había militado en el PSUC durante la dictadura. En aquel tiempo hacía dibujos para la revista del partido y firmaba como El Zurdo. Más adelante pasó por Nacionalistes d'Esquerra, y colaboraba con materiales del partido y con varias revistas, con la firma Esquerrà. A partir de este momento, nunca ha abandonado su sensibilidad nacionalista y de izquierdas. A partir de 2004 empezó a publicar novelas gráficas de contenido histórico, porque tiene claro que "la historia interesa a todo el mundo, pero es difícil que la gente compre libros de historia". En cambio, cree que se puede hacer pedagogía con un medio como la novela gráfica, que llega a los jóvenes y a los no tan jóvenes, y que tiene un gran impacto, gracias a su presencia en las bibliotecas. Él afirma que "sólo escribiré historia de Catalunya o de temas relacionados con Catalunya".

Una vida en dibujos

Lluís Juste de Nin se dedica profesionalmente al mundo de la moda, pero dedica muchas horas al dibujo. Fue el autor de la famosa Norma, el icono de las políticas de normalización lingüística de la Generalitat catalana en los años ochenta. Tiene una decena de obras publicadas. La primera, Els Nin. Memòries a llapis d'una família catalana, daba un repaso a la historia de su familia, y de forma breve describía la figura de Andreu Nin. Más tarde ha publicado varias obras de historia de Catalunya en las que adapta una novela muy conocida (de Thatckeray, de Dumas, de Lampedusa...) a un periodo determinado de la historia del país. Toda su obra es en blanco y negro, y con unos extensos cuadros de texto que complementan y aclaran el contenido de los dibujos. La novela gráfica, como pedagogía al servicio de la historia y del país.