Mientras el ejército iraquí tomaba el edificio de la televisión de Mosul, una bomba informativa sacudía a Wall Street y, de paso, al Ibex y al resto de los mercados. Según una encuesta de ABC News / The Washinton Post, Donald Trump aventajaría por segunda vez a Hillary Clinton, por un 46% contra 45% en intención de voto a su favor.

Que la cosa iba en serio se observó cuando el Dow Jones, que ha dado un vuelco desde una apertura positiva a un leve retroceso, ha pasado a perder cerca de un 0,5% después de que la CNN (cadena que está haciendo una dura campaña a favor de Clinton) indicara que en Silicon Valley temen un ciberataque el día de las elecciones.

El dólar retrocedió intercambiándose a 1,1033 unidades con el euro mientras el oro subía un 1,29%, hasta 1.288,45 dólares. La alarma había sonado.

Hasta entonces, todo tranquilo, con los indices de producción manufacturera americana dando señales de fortaleza, como por la mañana había hecho la industria china. Nadie temía tampoco que mañana la Reserva Federal anunciara una subida de tipos al estar el país tan cerca de las urnas. 

El Ibex, que subía al mediodía, se ha encaminado a las pérdidas, con la banca al frente. Sólo Técnicas Reunidas e IAG han aguantado con claridad en terreno positivo.  

Mañana pueden volver a cambiar las tornas en las encuestas electorales americanas, pero las dudas que se han abierto hoy aseguran un incremento de la volatilidad en los próximos días.