El Ibex ha subido un 0,28% en la apertura, acercándose a la cuota de los 8.900 puntos, prosiguiendo el tono alcista de la víspera, que si ayer fue impulsado por el aumento de la inflación en EEUU, hoy lo es por el crecimiento chino.

Se mantienen las constantes de un ritmo sostenido, cada vez más pendientes del apoyo de los bancos centrales y del gasto público.

La economía china ha crecido un 6,7% en el tercer trimestre con la inversión aumentando un 9% en septiembre impulsada por la fuerte aportación de las empresas estatales. A su vez, los servicios y el comercio minorista han mostrado a su vez mayor dinamismo que la industria, cuya producción se ha moderado hasta crecer un 6,1% en septiembre. Las bolsas asiáticas han reaccionado suavemente al alza, con el Nikkei avanzando un 0,21%.

En Europa, las bolsas mostraban una línea de continuidad en su tendencia alcista siguiendo al Brent, que ha remontado a 52,13 dólares a pesar de las ambiguas declaraciones de dirigentes de la OPEP favorables a lograr el equilibrio de los precios "sin demasiado desacuerdo". El euro también ha mejorado su posición intercambiándose a 1,0983 dólares. Ahora mismo se mueve en un rango entre 1,09-1,10.

En Wall Street, los futuros del S&P suben un 0,10% en una jornada en que tendrá lugar el último debate presidencial, que parece a priori favorable a Hillary Clinton, aunque nadie descarta sorpresas, ni tan siquiera Obama. Allí continúa la presentación de resultados, con Morgan Stanley y Halliburton a la cabeza. La Fed hará acto de presencia a través de su libro Beige.

En resumen, se presume más continuidad.