Los mercados europeos han perseverado en la línea alcista que tomaron desde el punto de salida, siendo la causa que la originó el rebote del Deutsche Bank, motivo de grandes comentarios en la zona Eurostoxx y en Wall Street, que se ha apuntado a la subida.

El portavoz del banco alemán negó que la entidad haya pedido ayudas al Gobierno mientras el mercado especulaba con la preparación de un plan de salvamento. El Deutsche Bank debe pagar una multa de las autoridades americanas que asciende a 14.000 millones de dólares por participar en el negocio de las "subprimes", que curiosamente alentó el propio Gobierno de EEUU bajo la presidencia de Bill Clinton.

No hace falta, además, un plan de salvamento para hacer que las acciones del Deutsche Bank suban por encima del 3%, como han hecho hoy. Basta con que bancos que trabajan con la Administración tramiten las órdenes de compras pertinentes. Ésa es la mecánica ordinaria. Sin ruido.

El resto fue más de lo mismo. De nuevo, los inventarios americanos de crudo cayeron estrepitosamente, en concreto 1,9 millones de barriles, cuando el petróleo hubiera tendido a bajar por la falta de acuerdo en la OPEP. El Brent subió a 47 dólares como en un cuento de Alibabá. Y eso ayudó a levantar el ánimo de Wall Street.

Aquí Técnicas Reunidas destacó sobre el resto por informes favorables, mientras la banca en general y Repsol avanzaban favorecidas por un ambiente favorable.  

En España, las hipotecas sobre viviendas cayeron en julio por primera vez en 25 años. Fue lo único que supo a plato no preparado. Hasta Draghi ha tenido que reconocer que, en los últimos tiempos, "operamos en muchos casos en aguas desconocidas". Al menos, el Ibex subió.