El Ibex ha logrado reaccionar en el último tramo de la sesión y ha subido un 0,10% gracias al argumento de comprar acciones en momentos de crisis. La sesión se ha desenvuelto sin nervios ni estruendos, pero atenta a la crisis siria y el enfrentamiento entre EEUU y Rusia tras un ataque a una base aérea de Assad ordenado por Trump.

En el orden económico, el dato de empleo creado en Estados Unidos ha sido muy positivo al reducir la tasa de paro en marzo al 4,5%, la más baja en diez años. En Europa, Grecia y los acreedores han llegado a un acuerdo sobre las reformas a aplicar por Atenas, y Deutsche Bank ha cerrado con éxito su ampliación de capital por 8.000 millones de euros.

Pero el ambiente se ha viciado de nuevo por el terrorismo con el ataque de un camión en Estocolmo sobre transeúntes. El riesgo político se ha disparado y el oro ha subido el 1,10%, hasta 1.266.45 dólares. Por su parte, el petróleo Texas ha caído un 0,4% hasta 51,49 dólares en un movimiento inverso al observado por la mañana con el Brent.

El Dow Jones se ha replegado el 0,08% y a media sesión se mantenía plano. Los mercados se han mostrado muy resistentes ante los daños geoestratégicos, pero la acumulación produce una desazón difícil de soportar.

En cualquier caso, la resiliencia ha acabado por imponerse.