El Ibex se ha lanzado a una carrera alcista siguiendo a Wall Street que le ha llevado a las cercanías de los 9.000 puntos. Lo curioso es que haga esto cuando Mario Draghi se ha apuntado a la tesis del "estancamiento secular" al igual que hizo Janet Yellen la víspera. Este alza es peligrosa.

La tesis del estancamiento secular proviene del prestigioso economista Lawrence Summers, que viene a sostener que viene un periodo de marcado enfriamiento económico global. Esta perspectiva hace que el dinero se abstenga de invertir por temor a lograr una baja rentabilidad. Esa expectativa hace que los tipos de interés tanto a corto como a largo sean muy bajos por la sencilla razón de que si no hay beneficios no hay apetencia de dinero. Eso es lo que ha dicho Draghi y el miércoles hizo la presidenta de la Reserva Federal. Dado que la demanda efectiva de dinero es insuficiente,  hay un exceso de capacidad bancaria. O lo que es lo mismo "hay demasiados bancos en Europa". según Draghi, quien no tuvo empacho en reconocer que los ultrabajos tipos a corto debilita su rentabilidad.

Este es el mensaje que han comprado hoy los mercados mientras el dólar caía. El euro se ha intercambiado por 1,1239 billetes verdes. A la vista del riesgo, el oro ha subido un 0,98%, hasta 1.399,10 dólares.

Aparte, la confianza del consumidor europeo se ha elevado hasta -8,2 puntos, con lo cual ha subido un 0,3%.

En Wall Street se ha cotizado al alza que las peticiones de subsidios de desempleo hayan descendido en 8.000 casos, lo que revela un aumento del desempleo, como avisó ayer Yellen.

Hoy, el BCE ha indicado que de cara a 2017 hay un un riesgo elevado en China a causa de sus problemas en reducir la sobrecapacidad que padece en algunos sectores, así como con los créditos morosos que se acumulan en el Imperio del Centro. Todo ello "podría llevar a un incremento de la volatilidad financiera global", señaló en su informe.

Los mercados están apostando fuerte ante un escenario complejo. Los bancos centrales han empezado a contar lo que realmente ocurre después de acabárseles todas las herramientas que tenían a mano, convencionales o no. Habrán de aplicarse políticas fiscales expansivas. En ese terreno se van a disputar los últimos rounds del combate final entre Hillary Clinton y Donald Trump en las presidenciales. Las bolsas encaran tiempos interesantes.