Los consellers Jordi Turull, Josep Rull y Quim Forn se han querido poner el pin de consellers el día que han abandonado la prisión de Lledoners para dirigirse hacia Soto del Real. Turull explica en su artículo en El Nacional la razón por la cual se ha puesto la insígnia del Govern: "Que no se olvide el porqué somos en la prisión".

Los presos se han marchado de Lledoners con ropa más formal que la que han vestido estos meses. Americana y camisa. Aunque en algún caso han optado por mantener el calzado deportivo.

Todos ellos se han reunido en Brians, antes de partir hacia Madrid. Por primera vez los siete de Lledoners se ha reencontrado con la presidenta del Parlament Carme Forcadell y la consellera Dolors Bassa. Desde noviembre del 2017 las dos mujeres no habían visto al vicepresidente Oriol Junqueras, ni a Jordi Cuixart, ni a Jordi Sànchez, ni a Quim Forn.

Han sido recibidos en Brians por todo el Govern, con Quim Forn a la cabeza, que los esperaba desde las seis y media de la mañana. La primera en llegar ha sido Balsa, acto seguido Forcadell y después, el convoy de Lledoners. Las dos mujeres se han fundido en un larguísimo abrazo cuando se han reencontrado después de vivir los últimos meses en prisiones separadas.

Les esperaba un médico, por si alguien requería su atención, pero el paso por Brians 2 ha sido muy breve. Justo el tiempo para que los Mossos y la Guardia Civil hicieran los trámites del traspaso de la custodia.