El gigante sueco de los muebles para el hogar se empieza a convertir "en mainstream", como se dice coloquialmente, entre los principales representantes de la política española. Si Podemos hizo un catálogo imitando el diseño de IKEA, este diario ha podido saber que algunos miembros del gobierno en funciones también son clientes habituales. La vicepresidenta en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, fue vista hace unos días en la tienda de muebles, hecho que generó alarma entre los periodistas, que incluso llamaron a su asesora para preguntar si se mudaba de casa. El hecho es que Santamaría fue para comprarse "cuatro cosas" para el hogar, y ha ironizado con los nombres de los aparatos, que son en sueco y a menudo complicados de pronunciar. Tal vez salió de compras por su cumpleaños, que ha sido este viernes y lo ha celebrado con un discreto aperitivo. Parece que aquello que los podemitas tachan de "casta", comparte con ellos las costumbres de bricolaje.