Una nueva preocupación: la próxima pandemia la puede provocar un virus asturiano y familia del Ébola. Se trata de Lloviu (LLOV), un virus del grupo de los filovirus (dónde está el Ébola) y que ha sido localizado por primera vez en murciélagos de una cueva de la localidad asturiana de Llovio. Es zoonotico, es decir, que pasa entre animales y humanos. Entonces, es de interés para la salud pública en todo el mundo por mor de la estrecha relación entre los animales, la agricultura y las personas. De hecho, la importancia de esta relación aumenta después de la destrucción e invasión en los últimos años de hábitats naturales.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que "las zoonosis comprenden un gran porcentaje de todas las enfermedades infecciosas recientemente identificadas, así como muchas de las existentes". Es por eso que el hallazgo pone de manifiesto la necesidad de futuras investigaciones para hacer frente a una posible nueva pandemia, tal como adelanta este lunes el diario ABC.

Un equipo de investigadores internacionales de la Facultad de Farmacia de Medway (Universidad de Kent, Reino Unido) ha aislado el virus y ha descubierto que Lloviu tiene el potencial de infectar células humanas y también de replicarse. Eso plantea la preocupación de una posible transmisión generalizada a Europa y la necesidad de realizar estudios inmediatos de patogenicidad y antivirales. El trabajo, publicado en Nature Communications, revela que es muy posible que las vacunas contra el Ébola no protejan contra el virus asturiano. Habrá que estar pendientes de los futuros hallazgos sobre Lloviu.